El gobierno de María Eugenia Vidal habilitó un incremento promedio de hasta el 140% en las tarifas de electricidad para el interior bonaerense, La Plata y Gran La Plata. Los aumentos serán de 130% en el caso de los usuarios residenciales, 115% tarifa general aplicada a comercios y oficina, 115% industrias PYME y 215% para grandes industrias. En la capital bonaerense, la tarifa de Edelap SA tendrá subas de hasta 170% para usuarios residenciales, 110% en comercios y oficinas, 130% industrias pymes, y 220% ajustado a grandes industrias.
El nuevo cuadro tarifario incluye, a las distribuidoras Edea, Eden, Edes y cooperativas que operan en el interior bonaerense.
La resolución establece, también, una tarifa social para aquellos usuarios residenciales con escasos recursos y precios inferiores para quienes logren reducir el consumo respecto del mismo período del año anterior. La tarifa que el usuario paga está conformada por dos componentes: el precio mayorista y el Valor Agregado de Distribución (VAD). Después, a la tarifa se le incorporan los impuestos y tasas de cada jurisdicción. El costo de generar y transportar (precio mayorista) es el mismo en todo el país.
El VAD corresponde a gastos operativos.
Edenor y Edesur no tenían autorización para ajustar el VAD. En cambio, Buenos Aires había autorizado ajustes parciales.
El nuevo cuadro tarifario incluye, a las distribuidoras Edea, Eden, Edes y cooperativas que operan en el interior bonaerense.
La resolución establece, también, una tarifa social para aquellos usuarios residenciales con escasos recursos y precios inferiores para quienes logren reducir el consumo respecto del mismo período del año anterior. La tarifa que el usuario paga está conformada por dos componentes: el precio mayorista y el Valor Agregado de Distribución (VAD). Después, a la tarifa se le incorporan los impuestos y tasas de cada jurisdicción. El costo de generar y transportar (precio mayorista) es el mismo en todo el país.
El VAD corresponde a gastos operativos.
Edenor y Edesur no tenían autorización para ajustar el VAD. En cambio, Buenos Aires había autorizado ajustes parciales.
