El ex fiscal Julio César Strassera aseguró que el kirchnerismo es peor que la Dictadura y el menemismo, y le dedicó una larga serie de insultos e improperios a la presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, al opinar sobre el caso Nisman.
«La dictadura militar mentía, no daba información, pero en lo formal obedecían a los jueces, jamás se les hubiera ocurrido echarme siquiera», rescató Strassera, que semanas atrás apoyó a Mauricio Macri en su promesa electoral de cortar con los avances en Derechos Humanos (a los cuales el jefe de Gobierno porteño denominó «curros») y adhirió a la teoría opositora de que Cristina Fernández de Kirchner no es abogada.
«No hay democracia. Menem era mucho más respetuoso de los fallos judiciales, pero esta gente no. Si usted me dice que vivimos en democracia porque es un gobierno producto de elecciones libres, entonces en democracia vivían la Italia de Mussolini y la Alemania de Hitler. Un Gobierno que no respeta la división de poderes, que trata de avasallar a la Justicia, que desconoce los fallos judiciales, no es un gobierno democrático. No es República», fustigó, en entrevista con el suplemento 3Días, de El Cronista.
Strassera dirigió sus dardos contra la primera mandataria: «La muerte de Nisman es un episodio gravísimo, ya sea suicidio u homicidio, lo cierto es que hay un solo responsable, que es el Poder Ejecutivo Nacional. La señora Presidenta no tiene vergüenza, no tiene pudor. Montó una escena vestida de blanco y en silla de ruedas y dijo una serie de disparates, uno tras otro, que no sé cómo puede haber gente que lo justifique. Este es un gobierno de ladrones y alcahuetes. ¿Qué se puede esperar que digan? La Presidenta tiene la cara de piedra».
Calificó de «desastre» a la procuradora general de la Nación, Alejandra Gils Carbó; consideró que tanto el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, como el secretario de Coordinación Estratégica para el Pensamiento Nacional, Ricardo Forster, «dicen estupideces»; y expresó que los funcionarios del gobierno nacional «no tienen seriedad y aparte no se respetan a sí mismos. Son serviles, adulones, aplaudidores oficiales, no he visto un Parlamento como éste».
Finalmente, Strassera se opuso al nombramiento de Roberto Carlés como reemplazante de Eugenio Zaffaroni en la Corte Suprema de Justica: «No lo conozco. Pero lo central es a lo que se han comprometido los opositores, no se debe nombrar un ministro de la Corte hasta que no haya un nuevo gobierno. No importa quién sea».
