Quieta non movere

Aprovechando que por ahí se nombró a Foucault.

«No hay que tocar lo que está tranquilo», decía Walpole, primer conde de Oxford, líder del partido whig, primer ministro de 1720 a 1742 de Gran Bretaña. Foucault usaba la frase para caracterizar la lógica liberal que se impondría tras el siglo XVIII: que ahora la razón de Estado no encontraba sus límites en la teoría de los derechos naturales, en limitaciones jurídicas, en contratos voluntarios, en cesión de derechos. Ahora, decía Foucault, la limitación del arte de gobernar viene de adentro, de la propia práctica gubernamental: entre las operaciones que pueden hacerse y las que no pueden hacerse, la división entre agenda y non agenda. Que el nuevo criterio de la acción gubernamental ya no es la legitimidad-ilegitimidad, sino la variante éxito/fracaso: y que el éxito o fracaso deviene del respeto de esa naturaleza de la práctica gubernamental -saber limitarse a lo que puede hacerse-.

Y por más apelaciones a la dignidad, a los «pequeños productores» (el nuevo fetiche que describe Alejandro en La Barbarie) , al Congreso, a lo que sea, la discusión de fondo, creo, sigue siendo acerca de la intervención o no del Estado. Ahí es donde me parece que abandonar el debate es perderlo. Podemos discutir, todavía, cómo se interviene, sobre quién, para qué. Pero no se puede reclamar, o en todo caso otorgar, que se suspenda la capacidad legítima del Estado de intervenir en la economía, hasta que decidamos si este Estado puede intervenir, si sabe cómo, si intervenir es parte de la agenda de lo posible o no. Si este Estado no puede intervenir porque los que gobiernan son feos y malos, corruptos o montoneros: ¿qué hacemos?, ¿nos sentamos con Borón, el MAS, Lozano y Cristian Castillo a esperar que venga la revolución de los buenos para que la intervención sea legítima?

A muchos no les gustará la polarización, y quedarán en el difuso estadio de la tercera vía, que nadie sabe bien cuál es, pero cuyo mayor recurso es hablar desde la moralidad del que no se mancha las manos con la toma de posición. Pero en este momento se está definiendo, al menos de acá a cuatro años, una nueva limitación práctica, una división racional entre lo que debe hacerse y lo que no, entre la agenda y la non agenda gubernamental. Más allá de todos los apelativos y eufemismos que se hayan usado, este conflicto específico es un punto de partida para la construcción de un nuevo marco de práctica gubernamental. Y la división resultante del conflicto entre lo que puede hacerse y lo que no -intervenir o no intervenir- va a delimitar la capacidad extractiva del Estado, ya no sólo respecto del sector agropecuario, sino de todos los sectores restantes que sean interpelados por el mismo. En este esquema de conflicto, y a esta altura del partido, me resulta difícil no estar del lado que considero con mayor capacidad intrínseca para resolver el problema central del país, la desigualdad. Sigo pensando, y no encuentro argumentos ni ejemplos válidos a contrario, que volver atrás con las retenciones es una pérdida de autoridad, y que esa pérdida de autoridad significa la configuración de una nueva división de hecho entre lo que el Estado puede y no puede hacer. Y no encuentro otro actor, además del Estado, capaz de realizar un proceso redistributivo que zanje las enormes distancias entre los que más y los que menos tienen. La teoría del derrame, les guste más o menos a los empresarios del agro, fracasó.

21 comentarios en «Quieta non movere»

  1. Antes que nada dejame decirte que tu nota es el mejor mentís al exabrupto de Feinmann (el bueno). Más de cuatro secretarios de redacción (y tengo 30 años de sufrirlos) deberían aprender a escribir así.

    Sobre el contenido no puedo agregar mucho por que es (para mí) inobjetable; eso es lo que está en juego; sólo le agregaría el aspecto del postergado avance en la institucionalización que debería haber llegado por propia iniciativa y no como recurso para descomprimir.

    Desde una perspectiva de izquierda, yo haría un planteo completamente diferente, partiendo de aquello que decía Hal: cómo nos paramos políticamente frente a las acciones contradictorias de un régimen bonapartista. Cómo preservar el discurso redistribucionista empujando para profundizar medidas efectivamente progresivas. Cómo generar la movilización orgánica que contrarrestre la presión derechista. Cómo alterar el régimen de alianzas con los capitales concentrados con los que el gobierno a supuesto controlar las variantes macroeconóicas y la inflación sin éxito.

    Pero, más acá de los sueños, la agenda de hoy es la que vos planteas: cómo dejar de retroceder en chancletas.

  2. es muuy bueno el articulo
    el unico defecto es el de siempre con el kirchnerismo desde mi punto de vista

    no es el discurso de lo que se hace el problema para mi sino lo que se dice es lo que se hace?

    y si eso fuera realmente asi
    lo que se hace realmente ayuda a llegar a donde se quiere llegar?

    por que
    aunque discursivamente este gobierno tenga ese interes de intervencion para repara las injusticias
    yo no veo que las cosas que hacen den como resultado eso
    y es por 2 cosas
    por un lado realmente no les interesa cambiar las cosas para mi

    o lo que es peor tal vez si quieren llegar al paraiso y no tiene cuadros tecnicos para lograrlo y se estan equivocando muy fiero por siemple desconocimiento o falta de equipos para transformar sus buenas ideas en planes

    pero el indec y otros temas similares te demuestran que son superficiales solo le sinteresa parecer y no ser

  3. Roberto: primero, gracias. Segundo, te podría robar el título -pero ya está- y ser menos pretencioso: cómo dejar de retroceder en chancletas tiene más gancho que una frase en latín. Soy mal vendedor, lo reconozco.

    Fede: la verdad es que a mi me cuesta pensar cuáles son las intenciones últimas de una persona. Trato de pensar en lo que se hizo. Estoy de acuerdo con vos en que lo que se hizo hasta ahora no alcanza. Pero justamente no alcanza porque hay muchos sectores presionando para coartar lo poco que el gobierno puede/quiere (lo discutimos después) hacer. Me parece que hay que tratar de contribuir para que el Estado recupere capacidades de intervención que había perdido. Y creo que éste es un conflicto, básicamente, por esas capacidades, y por la redefinición de los límites de la práctica gubernamental. Gracias!

  4. Creo que es un planteo interesante y honesto
    El problema que yo veo ,es que si tenes una herramienta y la utilizas mal , corres el riesgo que
    el común de la gente, y no hablo de grupos o minorias informadas , tenga la «sensación» de que el problema es la herramienta y no el uso que se hace de ella.
    Por eso creo que el Estado , en este caso el gobierno, debe ser «inteligente y virtuoso» en su afán de intervención.
    Querer aprobar la resolución «sin modificar una coma» no creo que sea inteligente y hasta es posible que en un próximo turno electoral lleve a mucha gente a votar por menos intervención del estado.
    Para el PE seria una victoria pírrica tal vez ,aunque soy conciente que muchos en el blog estarían contentos ya que prefieren perder la guerra a perder una batalla.

    salu2

  5. Perdón, pero yo no veo que la discusión sea «Estado puede intervenir? SI | NO».

    Lo que se está discutiendo, es COMO interviene el estado me parece, nadie dice «retenciones no» (que es una forma de intervenir desde el estado), sino que se dice «este nivel no porque hace inviable determinadas explotaciones». Y tal vez es correcto, o es lo mejor para la mayoría que esas explotaciones sojeras sean inviables, tal vez no.

    No lo se, pero me parece que no se está discutiendo si el estado interviene (algo en lo que la gran mayoría estamos de acuerdo), sino COMO interviene (un campo donde me gustaría que el estado mejore y mucho).

    saludos!

  6. Camargen: en tiempos en los que no estar con el campo es ser un «cyberñoqui K», agradezco lo de planteo honesto. En serio. Creo que también se pueden retocar algunos puntos de las retenciones, pero no de esta manera, con tipos gritando en las comisiones cuando habla un secretario de la Nación.

    Chacall: yo creo que cuando se discute si el Poder Ejecutivo puede implementar un aumento de retenciones por sí mismo -utilizando una herramienta de política económica como son los derechos de exportación- se está cuestionando, como mínimo hacia futuros conflictos, la capacidad del Estado de intervenir. No veo cómo ahora el Poder Ejecutivo podría plantear alguna reforma fiscal sin ser impugnado por los sectores afectados.

    Gracias por comentar!

  7. No creo que la discusión de fondo sea la intervención o no del Estado. Me parece un cliché. Me parece querer darle a este conflicto un trasfondo ideológico que no tiene. Se discute por guita y en menor medida, por política.
    En todo caso, se podría hablar del «limite» de intervención del Estado.
    Porque un limite tiene que haber. En eso estamos de acuerdo casi todos. No creo que ni el mas nacionalista peronista este a favor de un Estado monopolico absoluto de la economía.
    Mas alla de las quejas y llantos del campo y que este obviamente se oponga, no se puso en jate ni en consideración real si las retenciones debe existir o no, se cuestiono el ultimo aumento de las mismas. Entonces de donde sale el discurso de que «se cuestiona la autoridad del Estado para intervenir en la economia»?
    Se cuestiona un aumento de impuestos, simple, que derivo en una crisis. Pero no comparto esas visiones que intentan ver mas alla de esto, en este caso particular por lo menos.

    El gobierno se metió bien solito en este embrollo politico. Creo que si el gobierno «pierde» esta batalla, perdería seguramente poder político, no cabe dudas.
    Ahora, no veo que eso signifique necesariamente una «pérdida de autoridad, y que esa pérdida de autoridad significa la configuración de una nueva división de hecho entre lo que el Estado puede y no puede hacer.»

  8. Tomás, es lo mismo que decir que cuando Recalde requiere que se elimine el impuesto a las ganancias a los asalariados (o al menos que se suba el mínimo no imponible que pide la CGT), se está pidiendo que el estado no intervenga (y cuando decimos «impuesto a las ganancias a asalariados» estamos hablando de sueldos del primer decil – a lo sumo el segundo – ).

    Y no creo que sea así.

    saludos!

  9. Yo no igualaría derechos de exportación con impuestos, me parece que una de las victorias del «campo» fue esa identificación para que yo crea que lo que le hacen al campo mañana me lo hacen a mi sueldo, y yo la verdad es que no exporto nada: http://www.pagina12.com.ar/diario/elpais/1-106846-2008-06-28.html

    Por otra parte, yo no digo que se plantee la eliminación de todo tipo de intervención estatal, que ni el más extremo de los liberales plantearía, pero lo que creo es que es un conflicto por demarcar una nueva configuración del espacio de intervención del Estado en la economía, y que sobre esa configuración se van a dar los próximos conflictos.

  10. Tomas, si es o no un técnicamente un impuesto, es una discusión legal que ignoro.
    En la practica, es un impuesto y a pesar de todas los engaños y mentiras detras del disfraz de «herramienta necesaria de política económica», el unico objetivo real de este aumento de retenciones, es puramente fiscal.

  11. Tomás:“No hay que tocar lo que está tranquilo”… Dónde estaba tranquilo, Tomás, con el precio de las commodities sin techo? Y soja sin techo es precios internos sin techo, no sé si queda claro. Porque los campos donde se siembra rabanitos, escarola o alcachofas están en precio soja, no importa lo que vos particularmente plantes. Querés plantar anémonas? OK, pero pagame en soja.

    Este es el punto. Cuando se habla de sojización, parece que se hablara del sexo de los ángeles. Y es concretamente ésto, no dejar que el precio de la soja se traslade al mercado interno bajo la forma de zapallito, pan, leche o carne.

    Por éso tengo mucho miedo que, en vez de querer solucionar el problema estructural de la sojización (es decir, de la inflación galopante que se nos viene) quieran solucionar el problema coyuntural del piquete. Y ahí ‘tamos fritos.

    El gobierno está tratando de parar la sojización, tal como lo dijo Lousteau el primer día de la 125. La oposición, apenas el del piquete. O sea, hoy pensamos para hoy, mañana para mañana, and so on.

    Esta última campaña, en un contexto de retenciones crecientes (10,20,27.5, 35 y finalmente 4x%), la superficie sembrada de soja pasó de 11.64 millones de has. del 2002 a 16.5 millones de has. Esto es, el 52% del total de la superficie cultivable, que es de unos 32 millones.

    Y ésto sucedió no sólo en el contexto de las retenciones crecientes: Sucedió con una soja de U$S 350. Y el viernes cerró a 578. Y en 3 meses comienzan a sembrar la próxima campaña.

    Cuánta tierra piensan que va a quedar para todo lo que no sea soja? Nada. Olvidemonos de la leche, la carne y el pan. Saquenle una foto, porque a estos precios, dentro de 3 meses no queda nada que no sea soja.

    Gente, parecen piolas, no se trata de punto más, punto menos para zafar del piquete. Se trata de que tengamos qué comer. No jodamos. Después nos encargaremos de que con esa guita en vez de hacer trenes bajas hagan lo que tienen que hacer, pero si el estado no se queda con esa guita, no van a dejar 1 cm2. para plantar otra cosa.

  12. Eduardo…en serio que no te estoy chicaneando ni agrediendo… pero leé lo que escribí completo. Te quedaste en el primer párrafo. Yo digo que «no tocar lo que está tranquilo» es la fórmula que Foucault utiliza para caracterizar el liberalismo. Yo no estoy de acuerdo con esa idea liberal, y mucho menos creo que la soja haya sido un tema «que estaba tranquilo». Lo que planteo, por el contrario, es que este es un conflicto que va a delimitar hasta dónde se puede meter el Estado en la economía.

    Y estoy de acuerdo con vos en que las retenciones son una herramienta necesaria para que no se disparen los precios internos y para parar la sojización. Pero leíste el primer párrafo solo. Gracias por el aporte!

  13. La soja es el anticristo. ¿Por qué creer que la soja lo invade todo si la cosa es al revés? La ganadería se volvió improductiva, gracias a la política de precios altos y amenazas constantes , los tontos del campo vendieron vacas y como de algo tienen que vivir, gracias a la ing genética siembran soja: ¡pero qué poco patriotas que son! ¡avaros!. Entonces: la eterna política de curro fácil de este estilo de gobierno, ole!, aumenta las retenciones, porque no se van a escapar. ¿No es demasiado simple y patético para resolverlo citando a Foucault y Cia?
    ¿No hay demasiado empeño en algunos discursos en hablar de repartir y retener y JAMAS hablar de producir lo mas mínimo?
    Si lograran comercializar y exportar teorías, conspiraciones, discursos, hipótesis de conflicto, apelaciones a la dignidad…Otra que la soja. Tendríamos una nueva clase de ricos en Argentina. Pero eso si, un intelectual rico no «derrama», se va de viaje a Europa.

  14. Caroll: La soja no es el anticristo. Es, simplemente, algo que los argentinos no comemos, y que ya nos ocupó más del 50% de las tierras cultivables. Y que este año, a estos precios, simplemente no va a dejar un metro para cultivar lo que sí comemos. Tan difícil es de entender ésto?

  15. Eduardo, si no uno ve la cantidad producida por otros productos, la situación dista mucho de ser como la describis.
    Es una total mentira (y por eso el gobierno ya no insiste mas con ese argumento), que la soja ocupa tierras cultivables de otros productos de tal manera, que nos quedaríamos sin producir alimentos que si consumimos.
    Por ejemplo, si uno se molesta en entrar a la pagina del INDEC, cosa que no ha hecho la mayoría de los que opinan del tema, podemos ver que la producción de productos como girasol, mani, arroz, maiz y trigo han crecido o mantenido estable desde el 2001 hasta la fecha.
    Estamos muy, pero muy lejos de una situacion donde debamos importar alimentos que antes produciamos…

  16. Eduardo: preguntale a un ganadero o un tambero que prefiere hacer, si soja o carne – leche.
    Después preguntales/te TODOS por los cuales se pasaron.
    Te vas a dar cuenta que en gran parte es por la pésima, en algunos casos e inexistente en otros, política agropecuaria.
    Los que yo conozco hacen ganadería con un poco de soja para compensar, desde que los K con Moreno le pusieron la pata encima, les bajó el precio del kilo en pie y a los consumidores no nos paró de subir.

  17. Tomás: muy buen post. Felicitaciones.

    Esteban: que las cantidades producidas sean iguales o levemente superiores, puede deberse a mejor productividad, incluso a un clima más circunstancialmente benigno. No hay que perder de vista el análisis de superficies sembradas de los distintos cultivos. Incluso, si la tendencia es que algunos cultivos aumenten su superficie sembrada, es posible que lo hagan a costa de pérdida de productividad, porque son corridos de la zona núcleo hacia zonas marginales.
    Coincido, igualmente, en que la tropa afin al Gobierno no debería recurrir a la desesperación, que caracterizó a algunos opositores, que hasta hace poco hablaban del veneno de la soja y hoy piden que no se suban las retenciones a la soja, y que se deje en paz al campo.

    El problema de la «sojización» famosa, tal vez no sea que nos deje sin alimentos para comer acá, sino que antes de que eso ocurriese, nos encontraríamos con un apaprato productivo signado por el ingreso de divisas provenientes de la exportación de soja, y con un crecimiento de la actividad, reverso perfecto de la pérdida de competitividad de los otros sectores.
    No es tanto que la soja «invada» campos, como que absorba todos los recursos disponibles dejando raquítico al resto del aparato productivo.
    Saludos

  18. Absorción de recursos? La soja libera recursos, porque es más barata que el trigo o elmaíz.
    Y por otro lado, si el tema es el miedo a la sojización, porque le subierin las retenciones al girasol incluso más que a la soja.
    Dejémonos de excusas, el estado(lousteau) quería plata y listo. Lástima que se minimiza la concesión de usar ese dinero (el de la soja solamente) en obras, si no hay trampa la guita que qerían la pierden.

  19. La soja absorbe recursos, por ejemplo, de la siguiente manera: el armado de pooles de siembra con fideicomisos armados con depósitos de pequeños y medianos ahorristas (es decir, potencial crédito a emprendimientos productivos de otros sectores). Lógicamente los pooles de siembra no se dedican sólo a la soja, pero como bien dice Mariano T. la soja es barata de producir y cara para vender, o sea tiene altísima rentabilidad.
    Otra posible manera en la cual la soja (principalmente, también el girasol, el maíz y el trigo) absorbe recursos, indirectamente, es a través del ingreso de divisas por exportación, que modifica el tipo de cambio, de modo que el mismo siga haciendo viable la producción de soja, pero ya no la de varios otros productos, perjudicados por el abaratamiento de los bienes importados.
    El problema de las retenciones móviles, era el efecto sobre el mercado de futuros, nos decían. Pero la soja no absorbe recursos que puedan dedicarse a otras actividades….

    Por supuesto, todas estas consideraciones sólo es posible hacerlas desde un Estado «arbitrario», que necesita «excusas» para recaudar más «guita». Al productor de soja, le importa un carajo si lo único que es viable es lo que él produce. Seamos una República Porotera, y listo, piensan.

  20. Eduardo Real,
    por qué perdés el tiempo con Carroll?
    Una gragea de memorex,
    http://www.ellitoral.com/index.php/diarios/2007/12/27/economia1/ECON-04.html
    fijate la fecha, 27 de diciembre, y el precio U$S 300. Vos decís que el viernes cerró a U$S 578. Hablamos de casi un 93% de aumento en 6 meses. Suponiendo que bajara un 10% o un 20%, no me van a hacer creer que antes (a 300) era negocio y que ahora no. Con qué criterio pueden hablar de productores que se fundirían, y todas las calamidades que recitan? Dejémonos de joder, hay algunas cosas que son clarísimas:
    1. No esperes posiciones racionales ni nada parecido a la «consideración» de los que menos tienen por parte de Carroll.
    2. Es igual en el caso de la mentalidad empresaria. Están para hacer guita (de cualquier modo) y no para ocuparse de cosas que otro debería ocuparse. La soja, los ladrillos, la gente, como cualquier cosa, son herramientas para hacer guita y nada más.
    3. El único «otro» que puede terciar en favor de los más débiles es sin dudas el Estado.
    Por último, otra gragea de memorex como ejemplo: La FAA (junto a las otras 3 patronales agrarias)se opuso en set/07 al aumento de salario para los cosechadores de algodón del chaco y formosa, que salió adelante igual por fuerza de las otras entidades campesinas y el gobierno. Allí se decidió que se pagaría al peón $0,40 por kilo de algodón cosechado (que demanda unos 10 minutos de labor), es decir, $2,40 la hora, o $19,20 la jornada de 8 hs. sin parar (es pago por producción, no olvidar). Trabajando 6 días cobraría $115,20, algo así como $500 por mes trabajando de lunes a sábado. ESO ($500 x mes) les pareció excesivo. Eduardo, preguntale a Carrol cuánto pagaría ella? o cuánto le paga a su doméstica? No pierdas el tiempo. Hay mucha gente así, como Carroll, y para esa gente sólo vale hacer pesar los porotos a la hora de votar, y controlarles que paguen sus impuestos y donde no lo hacen caerles con la ley encima. Para eso hay que tener un Estado capaz y eficiente y un movimiento de masas organizado, que son los deberes que tenemos que hacer por mucho tiempo.

  21. Clotus: Le contesto a Caroll al solo efecto de cortarle los piolines de la careta por un lado, y por el otro para que, eventuales lectores que lo ven desde afuera entiendan de qué se trata.

    Trato de exponer la mitad de la info que los medios se empeñan en ocultarle a la gente para evitar que les caiga la ficha. Para que el tachero banderita siga pelotudo pero feliz con su «aguante el campo».

    Si no lo hacemos desde los blogs, desde dónde lo vamos a hacer? Desde TN?

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