El pacto incluye garantías para el regreso de Manuel Zelaya a su país y representa un paso para la reincorporación de Honduras a la OEA. La puesta en marcha de un proceso constituyente es otro de los ejes principales.
Manuel Zelaya, el ex presidente de Honduras cuyo gobierno fue derrocado por un golpe de Estado cívico-militar en junio de 2009, podrá regresar a su país sin riesgo de quedar detenido. Así lo asegura uno de los cuatro puntos del Acuerdo de Cartagena de Indias al que Zelaya y el actual presidente del país caribeño, Porfirio Lobo, adscribieron ayer en Colombia. El pacto sellado ante la mediación de Colombia y Venezuela representados respectivamente por el presidente Juan Manuel Santos y el canciller Nicolás Maduro es un paso que asegura, de manera casi indiscutible, el regreso de Honduras a la Organización de los Estados Americanos, ente del que fue suspendido tras la deposición de Zelaya. Hoy, el secretario general del organismo, José Miguel Insulza, hará la presentación formal.
Zelaya consideró el pacto un claro ejemplo para la democracia de la región. Para los muchos que hablan de democracia y no hacen nada por ella. Este es un acuerdo democrático, sostuvo el ex mandatario hondureño. El jueves pasado, el dirigente del Frente Nacional de Resistencia Popular, Juan Barahona, anunció que el ex presidente regresaría a Honduras el sábado 28 de mayo. Lobo invitó al presidente derrocado a volver a Honduras y reflexionó sobre la importancia de la jornada para su país y para Latinoamérica: Se ha dado un paso trascendental en lo que es consolidar la unidad de todos los latinoamericanos, aseguró.
Desde Venezuela, el presidente de ese país, Hugo Chávez, se manifestó satisfecho con el acuerdo, aunque no pudo viajar debido a una lesión en la rodilla. Honduras abre los portones a la democracia y nosotros estamos satisfechos de haber ayudado, apuntó desde su programa de televisión dominical. Estaremos pendientes de que lo planteado en el documento se cumpla, culminó. Santos, por su parte, confió en que tras la firma del pacto la reincorporación de Honduras a la OEA es indiscutible: Este acuerdo nos complace muchísimo a todos los latinoamericanos porque normaliza la situación en el sistema interamericano, señaló. Honduras fue suspendida una semana después de que el gobierno de Zelaya fuera derrocado, el 28 de junio de 2009.
Horas antes de la cumbre, Lobo negó que existieran en Honduras trabas para el regreso de Zelaya y explicó que la Corte Suprema anuló dos juicios que el Ministerio Público hondureño había iniciado contra Zelaya por supuesta corrupción. Tanto la Fiscalía del Estado como la Procuraduría General desistieron de presentar cualquier apelación a estas dos decisiones de la Corte. Los juicios están totalmente anulados, dijo.
La idea del Acuerdo para la Reconciliación Nacional y la Consolidación del Sistema Democrático en la República de Honduras nació en abril, durante un encuentro que Lobos compartió con Santos y el presidente de Venezuela, Hugo Chávez. Zelaya aceptó la propuesta días más tarde, en una reunión con Chávez. El documento final terminó de pulirse durante las últimas horas del sábado.
El establecimiento de las condiciones para el regreso de Zelaya a Honduras es uno de los cuatro ejes principales que desde un comienzo estructuraron el acuerdo, cuyo objetivo central es el retorno del país a la OEA, y que en el pacto final se convirtieron en diez.
Además de garantizar la plena vigencia de los derechos de Zelaya, el acuerdo insta a hacer lo propio con los ex funcionarios del gobierno de Zelaya y demás personas afectadas por el golpe de Estado y que debieron exiliarse. La puesta en marcha de un proceso constituyente es otro de los ejes principales. En ese sentido, el acuerdo establece que el camino se recorrerá a bordo de mecanismos de consulta como el referéndum y el plebiscito, establecidos en la reforma constitucional de enero pasado.
El documento adscripto también establece el inicio de las investigaciones sobre violaciones a los derechos humanos desde el golpe de Estado, además de la puesta en atención del respeto de los derechos de manera permanente. Sobre el último detalle, el actual y el ex mandatario reconocieron con su firma la creación de la Secretaría de Justicia y Derechos Humanos como entidad que permita fortalecer las capacidades nacionales para la promoción y protección de los derechos humanos en Honduras. Esa Secretaría, creada en 2010 por Lobo, dará seguimiento a las recomendaciones hechas a Honduras como resultado de haberse sometido al Examen Periódico Universal sobre Derechos Humanos ante el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas en Ginebra.
Además, el documento plantea el reconocimiento pleno de sus derechos según la Constitución y las leyes de Honduras. En uno de sus puntos establece que todas las acciones y decisiones del gobierno de Honduras se enmarcarán en el estricto cumplimiento de la Constitución y la ley.
También es destacable el planteo del pacto que insta a conformar una Comisión de Seguimiento encargada de verificar el cumplimiento de los procedimientos a seguir para la inscripción del Frente Nacional de Resistencia Popular en un ambiente de cooperación y transparencia. Esa comisión estará integrada por Holguín y Maduro y entrará en funciones tras la firma del acuerdo por Lobo y Zelaya.
Por estas horas, Lobo estará volando hacia Nicaragua, en cuya capital se reunirá hoy con su par de ese país, Daniel Ortega; de Guatemala, Alvaro Colom, y de El Salvador, Mauricio Funes, en el marco de los diálogos para el retorno del país a la OEA y abordar otros temas como narcotráfico y delincuencia.
Manuel Zelaya, el ex presidente de Honduras cuyo gobierno fue derrocado por un golpe de Estado cívico-militar en junio de 2009, podrá regresar a su país sin riesgo de quedar detenido. Así lo asegura uno de los cuatro puntos del Acuerdo de Cartagena de Indias al que Zelaya y el actual presidente del país caribeño, Porfirio Lobo, adscribieron ayer en Colombia. El pacto sellado ante la mediación de Colombia y Venezuela representados respectivamente por el presidente Juan Manuel Santos y el canciller Nicolás Maduro es un paso que asegura, de manera casi indiscutible, el regreso de Honduras a la Organización de los Estados Americanos, ente del que fue suspendido tras la deposición de Zelaya. Hoy, el secretario general del organismo, José Miguel Insulza, hará la presentación formal.
Zelaya consideró el pacto un claro ejemplo para la democracia de la región. Para los muchos que hablan de democracia y no hacen nada por ella. Este es un acuerdo democrático, sostuvo el ex mandatario hondureño. El jueves pasado, el dirigente del Frente Nacional de Resistencia Popular, Juan Barahona, anunció que el ex presidente regresaría a Honduras el sábado 28 de mayo. Lobo invitó al presidente derrocado a volver a Honduras y reflexionó sobre la importancia de la jornada para su país y para Latinoamérica: Se ha dado un paso trascendental en lo que es consolidar la unidad de todos los latinoamericanos, aseguró.
Desde Venezuela, el presidente de ese país, Hugo Chávez, se manifestó satisfecho con el acuerdo, aunque no pudo viajar debido a una lesión en la rodilla. Honduras abre los portones a la democracia y nosotros estamos satisfechos de haber ayudado, apuntó desde su programa de televisión dominical. Estaremos pendientes de que lo planteado en el documento se cumpla, culminó. Santos, por su parte, confió en que tras la firma del pacto la reincorporación de Honduras a la OEA es indiscutible: Este acuerdo nos complace muchísimo a todos los latinoamericanos porque normaliza la situación en el sistema interamericano, señaló. Honduras fue suspendida una semana después de que el gobierno de Zelaya fuera derrocado, el 28 de junio de 2009.
Horas antes de la cumbre, Lobo negó que existieran en Honduras trabas para el regreso de Zelaya y explicó que la Corte Suprema anuló dos juicios que el Ministerio Público hondureño había iniciado contra Zelaya por supuesta corrupción. Tanto la Fiscalía del Estado como la Procuraduría General desistieron de presentar cualquier apelación a estas dos decisiones de la Corte. Los juicios están totalmente anulados, dijo.
La idea del Acuerdo para la Reconciliación Nacional y la Consolidación del Sistema Democrático en la República de Honduras nació en abril, durante un encuentro que Lobos compartió con Santos y el presidente de Venezuela, Hugo Chávez. Zelaya aceptó la propuesta días más tarde, en una reunión con Chávez. El documento final terminó de pulirse durante las últimas horas del sábado.
El establecimiento de las condiciones para el regreso de Zelaya a Honduras es uno de los cuatro ejes principales que desde un comienzo estructuraron el acuerdo, cuyo objetivo central es el retorno del país a la OEA, y que en el pacto final se convirtieron en diez.
Además de garantizar la plena vigencia de los derechos de Zelaya, el acuerdo insta a hacer lo propio con los ex funcionarios del gobierno de Zelaya y demás personas afectadas por el golpe de Estado y que debieron exiliarse. La puesta en marcha de un proceso constituyente es otro de los ejes principales. En ese sentido, el acuerdo establece que el camino se recorrerá a bordo de mecanismos de consulta como el referéndum y el plebiscito, establecidos en la reforma constitucional de enero pasado.
El documento adscripto también establece el inicio de las investigaciones sobre violaciones a los derechos humanos desde el golpe de Estado, además de la puesta en atención del respeto de los derechos de manera permanente. Sobre el último detalle, el actual y el ex mandatario reconocieron con su firma la creación de la Secretaría de Justicia y Derechos Humanos como entidad que permita fortalecer las capacidades nacionales para la promoción y protección de los derechos humanos en Honduras. Esa Secretaría, creada en 2010 por Lobo, dará seguimiento a las recomendaciones hechas a Honduras como resultado de haberse sometido al Examen Periódico Universal sobre Derechos Humanos ante el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas en Ginebra.
Además, el documento plantea el reconocimiento pleno de sus derechos según la Constitución y las leyes de Honduras. En uno de sus puntos establece que todas las acciones y decisiones del gobierno de Honduras se enmarcarán en el estricto cumplimiento de la Constitución y la ley.
También es destacable el planteo del pacto que insta a conformar una Comisión de Seguimiento encargada de verificar el cumplimiento de los procedimientos a seguir para la inscripción del Frente Nacional de Resistencia Popular en un ambiente de cooperación y transparencia. Esa comisión estará integrada por Holguín y Maduro y entrará en funciones tras la firma del acuerdo por Lobo y Zelaya.
Por estas horas, Lobo estará volando hacia Nicaragua, en cuya capital se reunirá hoy con su par de ese país, Daniel Ortega; de Guatemala, Alvaro Colom, y de El Salvador, Mauricio Funes, en el marco de los diálogos para el retorno del país a la OEA y abordar otros temas como narcotráfico y delincuencia.