Este año cumplimos 10 años haciendo Artepolítica y decidimos festejarlo relanzando el sitio con un nuevo diseño. En vez de hacerlo en nuestro cumpleaños elegimos hacerlo el 9 de julio, en el cumpleaños de la independencia de nuestro país.
Porque, sin mucha pretensión de originalidad, consideramos que fue el inicio de algo que todavía permanece abierto.
Pueblo, Patria, nación, república, estado. Revolución, independencia, soberanía. Todo lo inconcluso, todo lo pendiente. Todo para ayer, ahora y siempre. El arte de la política, la única que cuenta: la que transforma. Y un grito de corazón: mucho para muchos.
Hace diez años escribimos esto:
“creemos que la política no es el arte de lo posible, sino el arte de descubrir, inventar, juntos, lo posible. Creemos que la política debe ser reivindicada, estudiada, pensada y practicada, porque la alternativa a la organización política es la dominación, ya sea violenta o tecnocrática. Creemos en la democracia. También creemos que la democracia es el nombre que tiene una cierta manera, la mejor manera, de crear poder. Creemos que, en política, quien calla, otorga. Por eso, los que hoy lanzamos Artepolítica, no somos neutrales. Con aciertos y errores, marchas y contramarchas, vamos a elegir, siempre, caminar por los caminos polvorientos del campo popular”.
En el medio cambiaron muchas cosas pero, sobre eso, seguimos pensando lo mismo. Relanzamos el sitio con algunas novedades (¡como el regreso de los comentarios!) porque seguimos creyendo en el valor del debate público.
Ahí vamos
Felicitaciones! Feliz cumple. Por más años de Artepolítica.
Felicitaciones por los diez años, por el nuevo diseño, por el esfuerzo y la voluntad del nuevo relanzamiento. Desde el comienzo fueron una referencia, ahora son más necesarios que nunca.
Felicitaciones, en esta vorágine del posmodernismo 10 años es un logro muy destacable (Mendieta diría ¡Que lo psrio!)
Más que una cita de lectura se han convertido en una adicción.
Me cuesta ser optimista pero. ustedes ayudan mucho a serlo.
Abrazos para todos.
Por el regreso de los que nunca se fueron