Balance del gorilismo olímpico

Como ex profesional del rubro y actual docente de Periodismo Deportivo en varias escuelas porteñas, me atrevo a formular algunas apreciaciones, a tono con el clima olímpico que comienza a desvanecerse después de sacudir o abrumar, usted dirá, todo como balance del balance, cuando Beijing comienza a ser un recuerdo. 1- La gran mayoría de los periodistas deportivos argentinos actuales adolece de las mismas carencias que el resto de sus colegas, es decir, conocen poco de historia argentina y menos de historia internacional. Obviamente, no tienen capacidad para establecer comparaciones de ningún tipo. Saben qué es bueno pero no qué es mejor, porque no tienen marco de referencia. En segundo lugar, les caben las generales de la ley, esto es, también son mayoritariamente gorilas y -como sus pares de las secciones de política y economía-siempre tratan de llevar agua para el molino antiperonista, o sea, inocentemente o adrede, juegan para los dueños del poder, en este caso mediático, actual herramienta básica para sojuzgar a los pueblos, con más prolijidad que antiguas ordalías militares. Por ejemplo, fustigan a la Secretaría de Deportes por el bendito «apoyo» que ni siquiera saben qué es, ni a cuánto asciende, porque están muy ocupados con la rodilla de Martín Palermo. 2- Aclaración sobre las supuestas calamidades provocadas por el peronismo. Es curioso, deportivamente. La máxima cosecha de medallas olímpicas (8) se obtuvo en 1948, y no fue en deportes colectivos, como ahora se quiere minimizar. Hubo dos oros en boxeo y uno en el (nada menos…) legendario marathon. También se logró un oro en Helsinki 52 (remo). Y desde allí hasta 2004, nada de nada dorado. Habría que preguntar por cuáles razones, a los que gobernaban el país cuando se realizaron los Juegos de los años 1956-60-64-68-72-76-80-84-88-92-96-2000. Sí, ¡bingo!: ningún peronista, salvo Menem, que en 1992 y 1996 era ya la antítesis del peronismo. Extrañamente, después de 52 pirulines, Argentina volvió al podio de oro en 2004 y 2008, con 4 preseítas para sumar a las antiguas 13. Creo que K y CFK son peronistas. 3- La política deportiva argentina siempre fue de apoyo a todos aquellos que logran las marcas mínimas exigidas por el COI. Con esas marcas, en otros países los mandan a juntar remolachas. Si aquí hiciéramos eso, imagínense lo que dirían esos deportistas sin chances sobre el bendito «apoyo». En Cuba, por caso, si tienen tres candidatos a una medalla, mandan al mejor, y los otros tres, inmensamente arriba de las marcas mínimas, se quedan en la Isla. Es otra política. No sé si mejor o peor. Los resultados numéricos indican que es mejor, pero la opción cubana por los más aptos, no parece tan buena. 4- No es cierto que nuestro país se destaque sólo en deportes colectivos. El boxeo (individual por antonomasia) es el deporte que más medallas le dio a la Argentina en JJ.OO. Total de 22, con 7 de oro. Tuvimos también medallistas en natación, atletismo, remo, tiro, yachting, yudo, equitación, la reciente en ciclismo, etc. Lo del fútbol y el basquet es coyuntural, olímpicamente hablando. Brasil nunca fue campeón olímpico de fútbol, por caso. Y no es que le falten ganas. 5- Como bien dice algún estudio incluído en interesantes posts deportivos, Argentina está donde tiene que estar. Y no está mal. Porque si no, habría que hablar de otros temas, ajenos al deporte, aunque siempre relacionados. El ejemplo de Dinamarca es interesante. Se trata de uno de los cinco o seis paises del mundo donde no existen desigualdades sociales (junto con Suecia, Noruega, Finlandia, etc). En los Juegos del 2004 ocupó el puesto 37º en el medallero, uno arriba de la Argentina (que ahora mejoró, de 38º a 34º). Cuando los daneses hablan de deporte se refieren al deporte que se practica recreativamente, no al que se ve por tv. Y nadie mata a nadie por un fallo equivocado de un árbitro. Les importa un comino la medallita. En su constitución, como en todas las del mundo, no existe el derecho o la obligación de lograr triunfos deportivos. Como debe ser, primero está la alimentación, luego la salud, luego la educación. Sólo que ellos no lo enuncian. Ellos lo hacen. Aquí tenemos periodistas deportivos quejosos por la falta de medallas pero (me incluyo) infinitamente peor educados que los daneses, a quienes -entre otras barbaries liberales que nosotros padecimos y padecemos- el racismo sarmientino no les tocó ni de lejos. 6- La última, también para apurados comunicadores de malas nuevas: cuando los deportistas argentinos arrasaban en todas las disciplinas durante el primer peronismo //campeones mundiales de basquet, primer campeón mundial de boxeo (Pascual Pérez), triple campeón mundial de Fórmula Uno (Juan Manuel Fangio), campeón mundial juvenil de ajedrez (Oscar Panno), más de 100 medallas panamericanas, etc.//, cuando todo eso ocurría, la «gente» (esto es, la clase media de aquel tiempo) decía que Perón invertía fortunas en el deporte porque quería salir en las fotos con los triunfadores. Y hoy dirían que «se despilfarra irresponsablemente el dinero (de esa misma) ‘gente’ «. Porque si de algo somos campeones olímpicos, es de gorilismo, ese increíble matrimonio contraído entre ignorancia e intolerancia, que nos baja de cualquier podio desde 1945.

Acerca de Mono Gatica

ENRIQUE MARTÍN (Mono Gatica). EX SECRETARIO DE REDACCIÓN DE LA AGENCIA DyN Y REDACTOR EN LOS DIARIOS LA RAZÓN, LA PRENSA Y CRÓNICA. ACTUAL PROFESOR DE REDACCIÓN PERIODÍSTICA E INTRODUCCIÓN AL PERIODISMO EN DISTINTOS INSTITUTOS PORTEÑOS.

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3 comentarios en «Balance del gorilismo olímpico»

  1. Muy bueno, Mono Gatica.
    Sería bueno ir incluyendo de a poco algunos posts sobre política deportiva, tomando en cuenta el rol del deporte en la educación formal, pensando si el estado debe darle prioridad a la dotación de recursos para favorecer la práctica deportiva de atletas consagrados o semiconsagrados, como Bardach, o si sería prioritario que la Secretaría de deportes articulara la práctica deportiva con el proceso educativo en los barrios donde se encuentran los chicos en situación de riesgo, etc.
    Saludos

  2. solo como comentario

    entre 1939y 1945 hubo algo llamado segunda guerra mundial que destruyo la juventud del hemisferio norte
    dejando pocas vacantes para los juegos olimipcos de 1948 y la influencia de peron en ese momento recien comenzaba llevaba 2 años de gobierno anterior si Kirchner todavia dice que la culpa es de menem que estuvo hace 10 años supongo que hay tambien deberia ser obra de el gobierno de ofarrell y de ramirez

  3. Creo que la sequìa tuvo que ver con el ènfasis que se dio en los olìmpicos gasta hace 10 años en losdeportes que acà son amateurs, y que allà son semiprofesionales.
    Porque si evaluamos, nosotros nos destacamos en deportes profesionales, esa es lo que unifica las medallas viejas con las nuevas, aunque siempre haya excepciones, como remo o yachting.
    Y ahora seguimos siendo amateurs en atletismo, pero podemos llevar a nuestros profesionales de otros deportes.

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