La soberanía no viaja en subte (todavía)

Los billetes de doscientos pesos son rojos, como el rojo punzó y como homenaje. La estación de subtes de la línea B, que alguna vez Mauricio se dignará a inaugurar en la esquina de Triunvirato y Monroe, se llamará Juan Manuel de Rosas por voluntad mayoritaria de los vecinos de Villa Urquiza (que contrapondrán entonces los nombres de los adversarios de Caseros).
En el reverso del billete hay una ilustración motivada en la Batalla de la Vuelta de Obligado, cuya fecha del 20 de noviembre de 1845, seguramente no se recordará mañana en ningún establecimiento ni público ni privado de este país. O quizás sí, livianamente, por tratarse -con acierto- del Día de la Soberanía Nacional, tan vapuleada (esa soberanía) por años y años de liberalismo oscuro y mitrista.
Juan Manuel de Rosas fue estanciero. Juan Manuel de Rosas fue violento como todos sus adversarios y gobernó a sangre y fuego, como la mayoría en aquella época. Juan Manuel de Rosas, de todos modos, está en el inventario como el hombre que gobernaba la Confederación cuando ocurrió la Batalla de la Vuelta de Obligado, cuya reseña es la siguiente:
La batalla tuvo lugar el 20 de noviembre de 1845 como parte como parte del enfrentamiento entre el gobierno de la Confederación Argentina, liderado por Rosas y la escuadra anglo-francesa cuya intervención se realizó con el pretexto de lograr la pacificación ante los problemas existentes entre Buenos Aires y Montevideo. Pero en realidad pretendían lograr garantías que permitieran el comercio y el libre tránsito por el estuario del Plata y todos los ríos interiores pertenecientes a la cuenca del mismo.La escuadra anglo-francesa estaba formada por 11 buques de combate que navegaban por el río Paraná desde los primeros días del mes de noviembre.La principal fortificación argentina se encontraba en la Vuelta de Obligado, donde el río tiene 700 mts. de ancho y un recodo pronunciado dificultaba la navegación a vela.El general Lucio Mansilla hizo tender, de costa a costa, sobre 24 lanchones, tres gruesas cadenas. En la ribera derecha del río montó 4 baterías artilladas con 30 cañones, muchos de bronce, con calibres de 8, 10 y 12, siendo el mayor de 20, los que eran servidos por una dotación de 160 artilleros.Además, en las trincheras había 2000 hombres al mando del coronel Ramón Rodríguez y un único buque de guerra- el Republicano – que tenía como misión cuidar las cadenas que cruzaban el río.El combate se inició al amanecer con múltiples bajas por parte argentina: 250 muertos y 400 heridos, 21 cañones de la batería cayeron en poder del enemigo que los inutilizó. Asimismo, incendiaron los lanchones que sostenían las cadenas y se perdió el buque Republicano, que fue volado por su propio comandante ante la imposibilidad de defenderlo.Los agresores, por su parte, tuvieron 26 muertos y 86 heridos y sufrieron grandes averías en sus naves que obligaron a la escuadra a quedarse 40 días en Obligado para reparaciones de urgencia.Las repercusiones de la batalla tuvieron gran difusión en toda América. Chile y Brasil cambiaron sus sentimientos – que hasta entonces habían sido hostiles a Rosas – y se volcaron a la causa de la Confederación. Hasta algunos unitarios – enemigos tradicionales de Rosas- se conmovieron y el general Martiniano Chilavert se ofreció a formar parte del ejército de la Confederación para defenderla de los enemigos europeos»
» A raíz de la resistencia de nuestro país, manifestada en esta ocasión, y la actitud posterior de no ceder a ingleses y franceses, que insistían en considerar al Paraná como un río internacional, fue que años más tarde terminaron firmando los acuerdos que dieron fin a la hostilidad. El acuerdo Arana-Deffaudis reconoce la soberanía argentina en los ríos interiores, se compromete a tributar al fisco nacional para circular por esos ríos y a saludar a la Bandera Nacional Argentina con una salva de 21 cañonazos.

Fue a raíz de esto último que el General José de San Martín legó su sable (seguramente lo más preciado para un militar) al Brigadier General Juan Manuel de Rosas con este texto en su testamento;

«El sable que me acompañara en las guerras de la independencia de la América del Sud le será entregado al Brigadier General don Juan Manuel de Rosas, quien con tanto empeño y determinación defendiera la Patria de las injustas pretensiones de extranjeros que pretendían humillarla».

Acerca de Mono Gatica

ENRIQUE MARTÍN (Mono Gatica). EX SECRETARIO DE REDACCIÓN DE LA AGENCIA DyN Y REDACTOR EN LOS DIARIOS LA RAZÓN, LA PRENSA Y CRÓNICA. ACTUAL PROFESOR DE REDACCIÓN PERIODÍSTICA E INTRODUCCIÓN AL PERIODISMO EN DISTINTOS INSTITUTOS PORTEÑOS.

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26 comentarios en «La soberanía no viaja en subte (todavía)»

  1. Aclaración:

    Los billetes rojos no son de doscientos pesos, sino de veinte, pero la Soberanía de una Nación siempre tendrá un valor incalculablemente más alto que un pedazo de papel moneda, como la Justicia social y la Independencia económica.

    De modo que, si el administrador quiere, puede corregir la diferencia numérica; de lo contrario, que cada uno interprete como quiera este hermoso acto fallido que he cometido,que para mí prueba que siento lo que escribo, en serio.

  2. “años de liberalismo oscuro y mitrista…” Mono, Ud tiene un lenguaje muy expresivo. Pero el liberalismo mitrista no puede ser TAN oscuro como Ud dice, en base a sus propias admiraciones. Si Rosas fue maravilloso por defender el derecho argentino a cerrar el Paraná a la libre navegación por barcos extranjeros, entonces Mitre fue igualmente maravilloso, ya que esa fue la razón de la guerra de la Triple Alianza, impedirle a Paraguay la libre navegación del Paraná y asfixiar a López económicamente.

    Yo siempre pensé que la guerra del Paraguay fue una verguenza argentina. Pero ahora, gracias a Ud, veo mi error.

  3. Efectivamente, Guillermo. La guerra de la Triple alianza fue una vergüenza argentina (de quienes la gobernaban por ese tiempo). Pero fue una vergüenza no por lo que usted dice, sino porque Argentina, Uruguay y Brasil funcionaron como agentes del imperio británico, para impedir que Paraguay continuara con su progreso y su independencia económica, al revés de lo que ocurría aquí, donde Mitre había optado sin tapujos por la dependencia más servil, el reverso de Rosas. Figúrese que, con su criterio, el Día de la Soberanía no sería el 20 de noviembre, sino el que dio fin a la liquidación brutal del Paraguay ¿O no?

  4. Mono, no haga historia a lo peronista en el siglo XIX, que no había peronismo. Al imperio británico lo que le interesaba era vender la mayor cantidad posible de sus productos en donde se los compraran. Por lo tanto, si podían vender en Paraguay, y en Argentina, les venía fenómeno. Por eso trataron de forzar el acceso al Paraná en la época de Rosas, y Rosas se los cerró por la misma razón que Mitre, para ahogar al Paraguay y mantenerlo dependiente. El imperio británico no tenía ningún interés atavistico o emocional en Sudamerica, simplemente práctico. No iban a liquidar a un cliente si podían conservarlo. La guerra del Paraguay les vino bien a Argentina a Brasil que liquidaron a un rival. Inglaterra perdió un cliente. La razón de la guerra, desde el punto de vista paraguayo, fue obtener la libre navegación del Paraná.

    En cuanto a la maravilla de Rosas, el oscurantismo liberal, etc, le tiro un tema para que converse con Eva Row. Qué cree que les hubiera pasado a los colonos judíos de Entre Ríos si, en vez de llegar post-Caseros, bajo los asquerosos liberales anticlericales, hubieran llegado en la época de Rosas, y hubieran sido recibidos por la Mazorca y la jerarquía eclesiástica que apoyaba al regimen.

  5. Pregúnteles usted. Y no haga como Pepe Eliaschev, que contestó una de mis críticas, donde lo llamé mercachifle del periodismo, diciéndome que «talvez ese «insulto» se debe a mi notoria condición de judío». Yo ni lo había mencionado. Entonces le dije que no se hiciera problemas. Que, para mí, el sería un mercachifle también si fuera católico apostólico romano, musulmán, budista o ateo. «Usted cree -le dije- que ¿hay alguna diferencia entre Morales Solá y Tenenbaum? Le recuerdo esto, Lagos, para que no recurra a bajezas, que ya tenemos bastantes…

  6. Más allá de consideraciones político-históricas, la Vuelta de Obligado es una gesta nacional que merece ser homenajeada recordando el heroísmo de los que lucharon bravamente contra una fuerza muy superior.

    Lejos quedaron las épocas en que el Día de la Soberanía era patrimonio de los «fachos» como p.ej. los muchachos de Tacuara. Yo recuerdo haberme «infiltrado» una vez en un acto del Movimiento Federal de Manuel de Anchorena.

    Saludos.

  7. Si. La Mazorca. Habria que profundizar sobre este instrumento del terrorismo de Estado Rosista.

    Una especie de Triple A decimononica.

    Larga historia de aparatos represivos estatales la nuestra.

  8. Ud critica todo lo que vino despues de Caseros sin excepcion. Yo le hice una pregunta: Que les hubiera pasado a los colonos judios si hubieran venido antes de Caseros. Ud me dice que eso es una bajeza. No se cual es la bajeza. Dificil de contestar si uno se niega a ver lo inaceptable del lado que endiosa, de acuerdo.

  9. Quiero aclarar con la pequeña controversia de la Triple Alianza, que efectivamente se hizo por la injerencia británica y no específicamente por lo que apunta guillermo lagos. Resulta que en esa época, GB necesitaba algodón y viéndose imposibilitado el comercio con EEUU por la Guerra de Secesión, viraron el mapa al floreciente Paraguay. Ahí fue donde necesitaron destrozarlo un poco y utilizaron a los gobiernos cipayos del sur para que ahogaran a su vecino.

  10. Guillermo: Ya que está tan preocupado por saber qué hubiese ocurrido con los colonos judíos de Entre Ríos si Rosas conservaba el poder después de Caseros, le diré dos cosas.

    1) Rosas jamás tuvo ni el más mínimo altercado con la incipiente colectividad judía en la Argentina, como no lo tuvo con los pobres y desposeídos, todo teniendo en cuenta que era un estanciero conservador que servía a su clase (que sí, era antisemita.) Es lo mismo que se dice de Perón sin ningún fundamente comprobable. Pero lea lo que viene ahora, en el punto 2. Va a interesarle, de seguro.

    2) Se trata de saber no «qué hubieran hecho», sino que pensaban de los judíos sus amados próceres liberales. Ya estoy ducho en chicanas, Lagos, así que reproduzco aquí material incontrastable perteneciente a Domingo Faustino Sarmiento (otro liberal, vendepatria), extraído de su libro «Condición del extranjero en América», que usted puede conseguir en cualquier librería. Aquí va, y es imperdible.

    Sabemos que Domingo Faustino Sarmiento, entre aciertos y errores que exceden cualquier polémica que no sea extensa y bien fundamentada, dejó impreso en sus libros y en sus cientos de artículos periodísticos una particular forma de ver las cosas y la vida. Para él, era civilizado sólo lo proveniente del mundo anglosajón (inglés, estadounidense, etc.) y era bárbaro casi todo lo demás. Son archiconocidas su furibundas diatribas contra indios, gauchos, negros, latinoamericanos, españoles y gitanos, a quienes consideraba “inferiores”. La Iglesia Católica tampoco se salvó de sus improperios.

    Se conoce poco (o se ha difundido poco), sin embargo, la opinión que al ex presidente, educador y excelente escritor le merecían los judíos. Claro que sus dichos hay que enmarcarlos en el tiempo en que fueron expresados, así como no parece sencillo vincular a la jerarquía católica de hoy con la Santa Inquisición de hace cinco siglos. De todos modos, no parece estar de más, a la hora de establecer por qué hoy, en el siglo veintiuno, alumnos de escuelas primarias deben honrar en TODOS los actos a un personaje de la historia que vivió y actuó hace más de 120 años, si es que ese mismo personaje (o su ideología, cuanto menos) es difícil o inconveniente juzgar con los parámetros del mundo actual.

    Como Sarmiento firmó cada una de sus opiniones, algo que lo enaltece, es sencillo conocer entonces lo que pensaba de los judíos, obviamente, en su tiempo. Lo dejó para la posteridad en su libro “Condición del extranjero en América”. Y cualquiera puede consultarlo.

    “El pueblo judío, esparcido por toda la Tierra, ejerce la usura y acumula millones, rechazando la patria en que nace y muere, por una patria ideal que baña escasamente el Jordán y a la que no piensa volver jamás. Este sueño, que se perpetúa hace 20 o 30 siglos, pues viene del origen de la raza, continúa hasta hoy perturbando la economía de las sociedades en que el judío vive, pero de las que no forma parte; y ahora mismo en la bárbara Rusia, como en la ilustrada Prusia, se levanta un grito de repulsión contra este pueblo que se cree escogido y carece del sentimiento humano, el amor al prójimo, el apego a la tierra, el culto al heroísmo de la virtud y de los grandes hechos, dondequiera que se producen.”

    Eso es lo que un liberal como Sarmiento pensaba de los judíos, y qué no hubiera hecho con ellos si lo hubiesen dejado el tiempo y las contingencias políticas. Pues bien, cuando yo postée esto, me dijeron que a Sarmiento había que juzgarlo en el contexto histórico en que vivió y actuó, y que en ese tiempo «todos eran un poco antisemitas», dado que reinaba en el mundo el «racismo científico». Bueno, juzgue usted la violencia de Rosas según esos parámetros, violencia que jamás tuvo como blanco a colonos judíos, pero sí -justamente- aquellos que odiaban a los judíos, como Sarmiento, Mitre y toda la oligarquía argentina. Igual que ahora. Andan del brazo con el rabino Bergman, sólo para sumar antiperonismo. Pronto lo tirarán a la banquina. No sé si fui claro.

  11. ‘…qué no hubiera hecho con ellos si lo hubiesen dejado el tiempo y las contingencias políticas…’ Bueno, los tenía allí y no hizo nada para impedirles asentarse y prosperar. Para alguien tan sensible a las chicanas como Ud, semejante grado de conjetura negativa es sorprendente. ‘…juzgue usted la violencia de Rosas según esos parámetros, violencia que jamás tuvo como blanco a colonos judíos, pero sí -justamente- aquellos que odiaban a los judíos, como Sarmiento, Mitre y toda la oligarquía argentina.’ Como no había colonos judíos en la epoca de Rosas, mal podía usarlos para entretener a sus muchachos de la Mazorca, a quienes no les quedaba otra fuente de entretenimiento que sodomizar unitarios antes de degollarlos. Supongo que cuando habla de la oligarquía argentina se refiere a la clase terrateniente del siglo XIX, ya que la clase terrateniente grande de hoy es gente como Grobocopatel o Werthein, que me extrañaría que fuesen anti-semitas. Otro sector importante de la oligarquía argentina de hoy son los enriquecidos con Menem y los Kirchner a traves de negociados con el gobierno, pero tampoco tengo motivos para sospecharlos de antisemitas.

    Pero si realmente se refiere a la clase terrateniente del siglo XIX que en el 99% de los casos hoy tiene que trabajar como todo el mundo para ganarse la vida, mal podía Rosas dirigir su violencia hacia ellos cuando, en su gran mayoría, los ayudó a hacerse ricos. Alpargatas si, libros no, es un lema esencial para entender el pensamiento peronista (si esas dos palabras son combinables), pero es buena idea leer historia en vez de inventarla.

  12. Volviendo por un momento al sentido original del post, aquí hay otra frase de una carta que San Martín le envía a Rosas después de Obligado:
    «Ahora los gringos sabrán que los criollos no somos empanadas que se comen así nomás sin ningún trabajo».

  13. Lo más lindo del billete de 20 pesos es la imagen del reverso, extraída de un cuadro pintado por el enemigo. No se ven las defensas costeras sino los barcos que rompieron el bloqueo.

    Guillermo, creo que su tarea está condenada al fracaso. El militante, más que nadie el nac&pop, tiene el vicio de usar a la historia como arma para la polémica política, así las deformaciones están permitidas según la conveniencia.

    Ah, por cierto que «pensamiento peronista» para muchos comporta un grosero oxímoron.

  14. Emilio, no se confunda, para los liberales el «enemigos» estaba defendiendo las costas. Para ellos,los barcos simbolizan la libertad y el progreso, no se olvide que somos la barbarie, ellos son la «cultura». Saludos

  15. Guillermo, me parece que su pregunta no tiene mucho sentido, por ser contrafáctica. Lo más parecido a colonos judíos que tuvimos durante el gobierno de Rosas fueron colonias de ingleses e irlandeses. Me explico: para el pensamiento de la mazorca judíos y masones eran más o menos lo mismo. Y protestantes y masones también. Confío en que has leído textos de la época donde se habla de masones, herejes y judíos con aproximadamente el mismo tono. Y no, no hubo persecuciones a estos por parte de la mazorca, dedicada como estaba a perseguir muy católicos unitarios. De hecho, la colectividad británica fue especialmente beneficiada por el gobierno de Rosas (mal que le pese a algún revisionismo simplista).

    Por otro lado usted sabrá que muchas de las primeras colonias judías se instalaron en el Entre Ríos de Urquiza, que había sido rosista (con su versión de la mazorca incluída) hasta unos minutitos antes de Caseros.

    Sería bueno que no se usara la historia para justificar nuestras posturas políticas actuales (que no necesitan esa justificación). Pero también sería bueno que no se recurriera a la historia para chicanear a partir de los prejuicios antiperonistas del presente.

  16. Ya que uno se le da por imaginarse qué hubiera hecho la Mazorca con los colonos judíos, otro podría recordar el pogrom que hicieron realmente los «niños bien» de la oligarquía con los judíos de Buenos Aires en la Semana Trágica de 1919. Mejor no, sigamos recordando el Día de la Soberanía.

  17. Guillermo, y el infaltable Emilio aparecen vomitando odio antiperonista retroactivo al siglo XIX.
    El primero se muestra ducho como una anguila para escapar a la apuesta redoblada cuando nos pronone imaginar que pasaría a los judíos con Rosas y le oponen el pensamiento efectivo de una primera figura del Olimpo liberal que era tan antijudío como lo fueron en general los librepensadores liberales decimonónicos, y también del siglo XX (a todos los cuales, incluido por ejemplo Churchill los salvó la aparición de un energúmeno de dimensiones estratosféricas como Hitler, ante el cual todos los demás pasaron a ser humanistas).
    Luego hace visajes diversos para procurar no ver cual es nuestra oligarquía, y no la ve antiobrera y antinacional porque se salta 150 años y se pone a averiguar el credo de Grobocopatel, tema sin duda fundamental y esclarecedor.
    Luego ambos juguetean con la idea de que «pensamiento peronista» pueda ser un oxímoron, reduciendo su nivel argumentativo al de dos señoras gordas de la parroquia del Pilar. Claro, eso y lo de «alpargatas si libros no» para resumir la impronta cultural peronista, movimiento que incorporó a la alfabetización mas gente que sus antecesores y que fundó escuelas por todo el territorio nacional.
    Guillermo está al tanto de la sodomización de unitarios en el siglo XIX. Cuestión de gustos, pero se le pasan temas bastantes mas trascendentes de nuestra historia política y cultural.
    Gracias Mono por tu presencia y por tu paciencia, seguramente superior a la mía. Personalmente, cuando me cruzo con un imbécil no suelo tener la suficiente como para argumentar.

  18. Pregunta federal: ¿nadie sabe dónde fue a parar la cabeza del general Ángel Vicente Peñaloza?

    Pregunta peronista: ¿nadie sabe quién fusiló sin ley marcial a decenas en los basurales de José León Suárez? ¿Y de los 330 muertos en el bombardeo a Plaza de Mayo un año antes?

    Pregunta setentista: ¿nadie sabe qué se hizo de 30.000 personas?

    Pregunta a liberales de Artepolítica: ¿no es hora de leer la historia de los que no ganaron?

    Ustedes mataron indios, gauchos, negros, radicales, obreros, peronistas, sindicalistas, estudiantes y amas de casa. En un país violento, no sería tan abominable. Lo inmundo es que lo hicieron sólo por dinero, y para entregar el país. Ayer, hoy y siempre.
    Háganse cargo, y de paso, múdense al foro de Lanata, que es mucho más fashion.

    PD Y sí, Carpe Diem, tengo paciencia. Sólo para corroborar que están ahí, agazapados, que hay que cuidarse de ellos, de sus falsos nicks, de su soberbia. Y especialmente de su ignorancia.

  19. Carpe Diem: a Perón lo trajo otra gente, no fui yo, que solamente expresé una opinión que ratifico: los militantes, en especial los nac&pop, usan la historia como arma para la polémica, de ahí la mirada maniquea. ¿No le gustó lo del oxímoron?, que poco sentido del humor.

    Héctor: al cuadro lo pintó el enemigo, el francés Pierre Puvis de Chavannes. De la imagen del reverso del billete podemos decir que es la versión francesa del combate, con las naves en primer plano en pleno fragor de la batalla. Por otra parte, desde Menem para acá esa cantinela de que los nac&pop son la barbarie ya está demodee, y hoy no da con la estética kirchnerista.

    Mono: siga escribiendo estos post históricos, no sabe como me hace reir.

  20. Emilio: Persiste en el error, los barcos de guerra representan a la Argentina que: «merece ser parte del imperio Britanico» tal como propuso Julito Roca, en su historico brindis, unos años mas tarde. En la costa estaban los Peronistas de la epoca tratando de ser un pais independiente.
    Eso podra estar demodee, pero algunos lo seguimos deseando.- Saludos

  21. Para Chubutense. Sorprendente oir una voz razonable.Lo de argumentos contrafácticos es perfectamente valido. Tan valido como preguntarse para qué sirve analizar las figuras del pasado con los valores de hoy (Mitre no era feminista y Rosas tampoco, Platón aprobaba el sexo con menores de edad). Particularmente cuando jamás se critican barbaridades actu

  22. (perdón, sin querer postée el comentario antes de terminarlo) actuales como la situación de los trabajadores rurales en provincias del Norte, casi todas bajo gobiernos peronistas. Me parecería más constructivo, y auténticamente ‘justicialista’, que este crónico vómito de odio al pasado, que es incambiable y tampoco cambia la situación actual.

  23. Guillermo lagos:
    No es odio al pasado, a lo sumo es un cierto desprecio por una lectura interesada de ese pasado.
    Y ese desprecio se justifica en las actitudes identicas de personajes del pasado y del presente.
    En que difieren el tratamiento que Sarmiento le dispensa al pueblo argentino, de lo que, hoy, sus opositores piensan y dicen del peronismo?
    Lo que pretendemos cambiar no son los hechos del pasado, son las actitudes del presente. Nos basamos en el pasado para demostrar la continuidad historica de nuestra lucha, que somos continuadores de una forma der sentir y pensar que tiene sus raíces en nuestra historia. Saludos

  24. Héctor,

    En cada paso usted confirma la manipulación de la historia por parte de los militantes, ahora puso a los peronistas en el siglo XIX como los defensores de la costa ante las armadas imperiales. Si esa interpretación anacrónica tuvo sentido alguna vez, su compañero peronista Menem y el 90% del movimiento que fue detrás de él ya la tiraron a la basura. Póngase al día, repita: Menem lo hizo.

  25. Emilio: Lo mio puede ser anacronico, pero los barcos de los billetes, expresan a un concepto de argentina que hoy defiende usted, usando los mismos argumentos que antes lo hicieron los exiliados en Montevideo y años mas tarde la llamada generacion del 80.
    Menem fue y es Peronista, pero seguro que usted lo voto porque es el peronista mas desteñido que pudimos conseguir.-

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