Para Balvanera, y otros que perdieron la memoria

balvanera (En : Todo Fue Para Nada?)¿Magdalena arriesgando el pellejo durante la dictadura? ¡Todavía suenan en mis oidos sus elogios embelesados a Martínez de Hoz, en su programa de radio!

LO QUE SIGUE ES PARTE DEL TESTIMONIO DE MAGDALENA RUIZ GUINAZU DURANTE EL JUICIO A LAS JUNTAS EN 1985. EL TESTIMONIO COMPLETO ESTA EN

http://www.nuncamas.org/testimon/ruizguinia_magdalena.htm

Dr. Arslanian: Dr. STRASSERA, ¿desea formular alguna pregunta?

Dr. Strassera: Sí, señor presidente; yo quiero que la testigo haga una pequeña reseña de su labor entre los años 76/82 y su vinculación con el tema de los desaparecidos; cómo comienza con esta tarea.

Guiñazú: El tema desaparecidos empezó a ser una realidad porque obviamente se hablaba del tema; cuando me vino a ver a Radio Continental un grupo de señoras; primero vino una señora que según la descripción que me hicieran de ella después, creo que era Azucena VILLAFLOR, quien fue asesinada posteriormente, desaparecida, que fue la primera presidenta de las Madres de Plaza de Mayo; yo no sabía quiénes eran las señoras que me venían a ver.

Dr. Arslanian: ¿Recuerda el año?

Guiñazú: Sí, fue al final del ’76 porque me parece que era verano o habrá sido febrero del ’77; ella me contó que su hijo estaba desaparecido y que en La Plata había un lugar terrible donde había otra gente que estaba en condiciones infrahumanas, torturados; ahora claro, le repito, no sabía quién era ella, me impresionó muchísimo su relato, pero ahí comencé a enterarme de una cantidad de cosas; después vino otro grupo de señoras de la cual sí recuerdo a la Sra. de BERSTECANF; ellas también me trajeron datos concretos. Después desapareció un colega nuestro, un reportero gráfico, Eduardo FRIAS, que trabajaba en la revista Gente, en la Editorial Atlántida. Eduardo FRIAS, con quien siempre he tenido muy buena amistad, desapareció, creo que fue en julio del ’77 y todos nosotros, colegas de FRIAS, nos preocupamos terriblemente, como es obvio, por lo que había ocurrido, y entonces en mi caso yo empecé a llamar por radio. Que cómo era posible que un hombre de bien, un hombre que tiene una vida de familia, de trabajo, cómo era posible que un día había salido a tomar el colectivo y no había aparecido más, se lo había tragado la tierra; pasaron los días y una noche, más o menos unos 15 días después, me llama Eduardo a la medianoche, llorando y me dice: «Estoy de vuelta en casa», y entonces lloraba tanto que yo no podía saber más; le dije: «Pero decime qué te ha pasado», y entonces me dijo: «Mirá, no te lo puedo contar ahora». Me lo contó después, por supuesto. «Pero lo único que te quiero decir era que en el lugar donde me tuvieron tenían la radio puesta a alto volumen y yo escuchaba que vos pedías por mí y entonces pensaba que ustedes, mis amigos, no me hablan olvidado». Eduardo FRIAS fue devuelto a su casa unos 15 días después, justamente cuando él me llamó por teléfono y le pidieron disculpas, que había sido una equivocación; él estuvo en ese lugar vendado, durante todos esos días con la radio a todo lo que daba, para que no se escucharan los ruidos del exterior y todavía la impunidad llegó hasta tal punto, que al día siguiente esos individuos que lo habían secuestrado le llevaron de vuelta el gamulán a su casa, diciéndole: «Mirá, che pibe, te olvidaste el gamulán», y se lo llevaron de vuelta; entonces, cuando esto ocurrió, más los relatos de las Madres de Plaza de Mayo, que me habían venido a ver, ya no tuve ninguna duda de lo que estaba ocurriendo y entonces empecé a ocuparme en el medio de comunicación en el cual yo trabajaba; empecé a leer todo lo que se publicaba sobre el tema, artículos, solicitadas y quiero recalcarlo aquí, la empresa jamás me lo objetó; muy por el contrario, cuando más adelante las amenazas arreciaron, incluso su directora me ofreció amparo en su casa a mí y a mis hijos; las cosas se fueron sucediendo de esta manera, es decir, las Abuelas también se acercaron a la radio y me trajeron la carpeta con documentación sobre los nietos desaparecidos que estaban buscando y allí hay un episodio que también creo que es interesante contar. Un día, el entonces coronel Carlos CERDA, que creo que era auditor de la Presidencia, a quien yo conocía por haberlo tratado en casa de amigos comunes, me habló y me dijo que el presidente VIDELA estaba molesto porque yo insistía permanentemente con el tema desaparecidos y el tema de los chicos; se ve que posiblemente le había molestado en forma particular al entonces presidente VIDELA. Un argumento que yo había empleado esa misma mañana casualmente y que era tomado de las Escrituras, es decir cuando se dice «ay de aquel que escandalizare un niño, más le valiera haberse colgado una piedra de molino en el cuello», yo señalé que escandalizar a un niño no es la cosa simplista que se piensa del que presencia un espectáculo pornográfico no apto; el gran escándalo en este caso es separarlo de su familia, del lugar donde justamente Dios lo ha hecho nacer, es con una incalificable soberbia jugar a ser Dios, entonces CERDA me especificó que lo que él me decía, lo que él me transmitía, de ninguna manera significaba una presión y me preguntó, al decirle yo que si tuviera un nieto o un hijo desaparecido lo buscaría hasta el último día de mi vida, entonces me preguntó: «¿Ud. qué haría?» «Devolverlos, devolverlos». Hacía pocos días que el Buenos Aires Herald había publicado un editorial diciendo que si no se hacía una devolución pública por razones obvias, que por lo menos se tomara contacto en forma reservada con cada una de las familias y se devolvieran esos chicos. Yo fui lo suficientemente ingenua, supongo, como para preguntarle si en Presidencia no habían visto la carpeta de las Abuelas, que en aquel momento, incluso, relataba que había dos chicos que se habían encontrado en una institución de San Martin, Instituto de Menores, donde habían sido registrados como abandonados y que después se habían rastreado y después habían sido identificados; entonces CERDA me dijo que no, que no conocía esa carpeta y entonces yo, por intermedio de ese amigo común en cuya casa lo había conocido, al día siguiente le hice llegar la carpeta y le dije: «Hágale llegar la carpeta al presidente VIDELA , no puede ser que él ignore esto»; uno a veces es muy ingenuo pero supongo que a lo largo de estos años difíciles fuimos corroborando cosas que nos parecían absolutamente imposibles que hubieran ocurrido.

Dr. Arslanian: Alguna vez, señora, a propósito de este relato que Ud. está haciendo, ¿tuvo alguna entrevista oficial con miembros del gobierno o de las Fuerzas Armadas, vinculados con la difusión, con la libertad o no para la difusión de noticias, etcétera?

Guiñazú: Hubo varios episodios; yo claro siempre lo recalco, tuve la gran suerte de trabajar en un medio privado, o sea, yo jamás he juzgado a mis colegas que tenían que trabajar en un medio oficial y que era ese trabajo o quedar desocupado; yo, como le digo, estuve en un medio privado que me apoyó y entonces claro las amenazas y las presiones venían por otro lado; no sé si vale la pena extenderse, son de dominio público; extensamente se habló de ello en los diarios y en todos los medios en su momento; si es de interés del Tribunal traje algunas de las amenazas por escrito que recibí, entonces evidentemente, por ejemplo, hubo una circunstancia muy desagradable en la que me llamó por teléfono el entonces jefe de Policía, el Gral. SASIAIÑ, salió al aire para recriminarme el haber hablado de desaparecidos, que en este caso fue por dos personas que desaparecieron en Córdoba y que al día siguiente aparecieron y que entonces, bueno, como yo me había hecho eco, yo le dije que me había hecho eco lamentando que una vez más en los diarios de mi país aparecieran ese tipo de noticias, que esperábamos que nunca más se publicaran; entonces SASIAIÑ me recriminó públicamente, puesto que me llamó por teléfono, salió al aire, lo hicimos salir al aire a este hecho, y cuando yo le dije, pero además, le dije yo, por qué; en fin muy amablemente dijo: «Bueno una persona como Ud. ¿cómo se hace eco?», pero Sr. jefe de Policía, Ud. debe tener mi prontuario sobre su escritorio, así que Ud. sabe muy bien quién soy yo; y dijo: «Sí, efectivamente lo tengo sobre mi escritorio»; o sea que creo que él sabía muy bien con qué tipo de persona estaba hablando y después, en otras oportunidades, por ejemplo, se presentaron en la radio misma dos individuos que venían, según ellos, de Presidencia y a través de los años heguardado sus nombres y los números de las credenciales que tenían; no sé si al Tribunal le interesará porque los tengo acá; se llamaban… No, claro no querían darme las credenciales, entonces yo le dije: bueno, mire, porque me dijeron: «Ud. esta mañana estaba hablando de desaparecidos, entonces en Presidencia queremos tener la cinta de lo que Ud. ha dicho», yo les dije: Esta es una empresa, de modo que si Uds. quieren la cinta grabada traigan un permiso por escrito, una solicitud por escrito y nosotros le daremos con mucho gusto la cinta, pero acá en esta empresa, no sale ninguna cinta grabada sin que medie un pedido expreso; entonces fue cuando vieron que no era tan fácil, me permitieron sus credenciales que correspondían a Daniel Oscar RAYAN -auxiliar de Inteligencia No 128- y Ricardo Miguel PROTOMASTRO, cabo N° 5460; si estas credenciales eran verdaderas o no, no puedo decirlo; esto era lo que ellos exhibieron en aquel momento; bajaron conmigo mis compañeros José Ignacio LOPEZ y Marta LAMAS, por lo que realmente era bastante impresionante y ellos fueron muy solidarios conmigo y bajaron y me acompañaron; yo llamé a Presidencia inmediatamente, conté esto, di estos datos que les acabo de mencionar y bueno, me dijeron qué barbaridad, esto no viene de Presidencia; después hubo muchos otros tipos de presiones telefónicas, de persecución callejera; uno de mis hijos, mi hijo… había advertido un coche que estaba parado frente a nuestra casa con dos individuos con actitud, así, muy desafiante, que miraban a los chicos que entraban y salían, y yo realmente los vi un día pero no les di demasiada importancia; después, cuando empezaron a sacar fotos del frente, de la puerta de entrada de mi casa y empezaron a sacar fotos de cuando yo entraba y salía muy abiertamente, me di cuenta que debían tener un propósito intimidatorio, y entonces un día empece a darme cuenta que ese coche, que era un Peugeot blanco con una determinada chapa, siempre la misma, me seguía y entonces coincidió que un día, estando yo trabajando a la tarde, se presentó una persona en mi casa, un hombre, la Sra. que está en mi casa desde hace más de 20 años no tenía los anteojos a mano así que lo único que alcanzó a ver en la credencial que le mostró era «Ejército Argentino» y entonces le dijo que le estaba haciendo una encuesta, que quería saber la edad de mis hijos, cuántos vivían en la casa, qué horario teníamos y bueno, mi hijo menor apareció en ese momento y quizás él pensaba que esta Sra. estaba sola en mi casa y entonces le preguntó qué deseaba y le repitió lo mismo y se fue; entonces me llamaron a mi lugar de trabajo, le dije: Bueno, pregúntele al portero si es verdad que si es una encuesta, que este hombre dijo que tenía autorización del portero, por supuesto en ningún piso se había hecho ningún tipo de interrogatorio. Entonces yo allí me di cuenta que ya la cosa iba avanzando; la única persona que yo conocía militar era el jefe de Prensa del Comando en Jefe, el Cnel. SIGARAN, con el cual había conversado en una oportunidad, porque los corresponsales nuestros en el Consejo Supremo me habían hablado muy bien de él y él había manifestado el deseo de conocerme y entonces tenía el teléfono del Comando; entonces lo llamé y le dij: Cnel., Ud. se acuerda de mí. Sí, por supuesto. Mire, pasa esto, esto y esto; yo quiero protección para mí y para mis hijos; entonces él, a la noche, porque además cuando volví a mi casa llamó el teléfono y nos anunciaron que nos iban a matar a todos esa noche; entonces lo volví a llamar, le pedí por favor que pusiera vigilancia en mi casa, al poco rato llegaban unas personas también que se quedaron toda la noche y al día siguiente se fueron y después cuando las amenazas volvieron a repetirse a la noche, lo volví a llamar al Cnel. a su casa. El me había dejado su teléfono y le dije: Mire, yo tengo que salir de casa, empiezo a trabajar muy temprano, a las seis de la mañana, es de noche y yo ni voy a dejar de ir a trabajar, pero tampoco quiero que me maten. Y debo decir que él realmente tuvo una actitud muy noble porque vino a buscarme él en su coche y me llevó a mi trabajo. Al día siguiente, el entonces subsecretario del Interior, que era el Cnel. CERDA, a quien como ya expliqué conocía, me citó, me preguntó los detalles, le expliqué todos los detalles de lo que había ocurrido y entonces me dijo: Bueno, éstos son grupos incontrolables, no hay que darle demasiada difusión al asunto, porque estos hechos son desestabilizantes y yo creo… Yo dije no, yo le voy a dar la difusión que creo que debe dársele, es mi única protección, y dijo: No, yo voy a hablar con el jefe de Policía para ver qué se puede hacer; desde ese momento cesó la persecución de ese tipo con autos y domiciliarias, pero continuó por correo, que son algunos que les he traído, y telefónicamente siempre.

Dr. Arslanian: Exhiba esa documentación que Ud. trajo Sra. y sin perjuicio de eso se le pregunta si Ud. conoce otros periodistas que a causa de la difusión de noticias vinculadas con desaparición de personas hayan sufrido también amenazas.

Guiñazú: Sí, por ejemplo a José Ignacio LOPEZ, después de haber escrito un artículo que relataba la muerte de monseñor ANGELELLI, le volaron la casa; creo que hubo muchos colegas en ese momento que fueron amenazados, Aída BORTNIK por ejemplo; SILVERKASTEN, que después se fue a Venezuela; mire, la lista sería muy larga; si Ud. quiere hago memoria y recuerdo, pero era una cosa bastante común; recuerdo también que en el caso de este muchacho que murió de leucemia muy joven, que trabajaba en La Opinión, hubo una verdadera persecución; tuvo que salir por los fondos de su casa porque había varios coches en la puerta esperándolo; no sé cuáles querrá…

Dr. Arslanian: Suminístrelas al secretario.

Guiñazú: Esta es la última que llegó para Navidad del ’84; observen que en la mano de la figura de Papá Noel, que tiene un gorro frigio, tiene dinamita.

44 comentarios en «Para Balvanera, y otros que perdieron la memoria»

  1. Es bien sabido el papel que jugó y juega Ruiz Guuiñazu en el recuerdo de los años de plomo. No sólo ha sido su papel en la CONADEP sino sus reiteradas producciones de documentales televisivos y participaciones en diarios, revistas y programas especiales. Recordemos que en la década de los noventa, cuando Massera, el «Turco» Julián y Etchecolatz iban a los programas de tele, ella se pronunció por «no recibirlos».

    Dicho esto paso a aclarar que me cae muy mal Magdalena y por esa misma razon no la escucho ni la voy a escuchar. De la misma manera nunca me hice mala sangre por lo que dice Clarinada.

    Por otra parte no conozco lo que nombra Balvanera pero siendo cierto o no, es cierto que muchos periodistas estaban acomodados durante la dictadura y uego pasaron a la democracia sin perder las ropas en ello. Repito: no sé si era el casdo de Ruiz Guiñazu pero casos como el de Balvanera se cuentan de a cientos.

    Y eso es algo que todavía nos debe el periodismo. Aquellos que piden autocrítica constante a ciudadanos y Gobernas, que se atribuyen la representación de «la gente(como uno)» y que se colocan en un pedestal desde el cual juzgan a la sociedad con elc eño fruncido o la cara amable según cuantos sean los billetes, nos deben una merecida autocríica.

  2. Julian:
    su afirmación «casos como el de Balvanera se cuentan de a cientos», requiere minimamente una aclaración.¿Lo está acusando de ser un periodista de esos?

  3. No hay duda de que Ruiz Guiñazú tuvo una actitud valiente durante la dictadura (dentro de lo que se podía esperar, nunca fue una revolucionaria), pero eso no quita que pueda haber elogiado la política económica de Joe. En su programa tenía una amplitud que le permitía tener columnistas tan opuestos como Eduardo Aliverti y Carlos Burone, un apologista del Proceso.

    Recuerdo que una vez junto con Mónica Cahen d’Anvers fueron a ver a Harguindeguy, supongo que por el tema de la censura. Eso fue tapa de la revista Humor.

    Actualmente no la escucho ni me interesa lo que dice, pero igualmente le conservo respeto por su actitud en esa época y jamás la igualaría con los representantes de la «prensa canalla» que actuó durante el Proceso, como Daniel Mendoza, José Gómez Fuentes, Guillermo Aronín, Ramón Andino, Renée Salas y tantos otros.

    Saludos.

  4. Recuerdo el pasado de Magdalena, hubo épocas en las que se jugó mas que muchos de los que nos gobiernan y acostumbran a contarnos un pasado que no tuvieron. Pero debo decir que en el post de Balvanera puse que esta periodista me defraudó en los últimos años porque defendió enceguecida a este gobierno y luego entendió la realidad. Que un ciudadano común se equivoque es comprensible, no lo justifico en un periodista que tiene el deber de conocer algunos temas a fondo antes de formar opinión.

  5. El problema, Tomas, es que la «Patria Chcarera» no se jacta de nada.

    Caso contrario al de la pareja de los «usureros patagonicos» que lucra con la desmemoria de unos y la complicidad de otros.

  6. Yo escuché a la Patria Chacarera jactarse de muchas cosas durante 120 días. De ser la reserva moral de la Patria, por ejemplo. De luchar por la dignidad, también.

  7. che caroll, posta, escribite algo de la realidad, sin agravios, con argumentos: ¿Por qué te molesta tanto el kirchnerismo?. ¿Por qué te molesta tanto que algunos estemos de acuerdo con algunas políticas de este gobierno?. ¿Por qué crees que vivo en una irrealidad?. ¿No sos funcional a lo que criticas si todo es tan dicotómico?.
    Durante el conflicto con el campo apoyé al gobierno, fui varias veces a la plaza, tuve discusiones en el ámbito laboral. Escuhé y fui escuchado. Luego, mi posición no prevaleció institucionalmente. Y es cierto que en este conflicto hay mucha mezcolanza, se puede identificar a varios sujetos vernáculos, con el gobierno y con el campo, en los movimientos sociales y en la clase medio seudo-despolitizada. Ta bien, es un país en reconstrucción. Es lo que hay. Pero no entiendo eso que si yo apoyo determinadas políticas no veo la realidad. Es política, caroll. De eso se trata. Pregunto: ¿te agraviaron mucho en este tiempo que enseguida disparás?
    ¿No te pesa ponerte en el lugar de quien decide quien ve la realidad y quien no?
    Me parece que todos tenemos subjetividades y este es un ámbito de esa discusión. Si te ponés por encima de tu subjetividad se hace dificil el intercambio de opiniones.
    Dale caroll, escribite algo, posta, sin falsas dicotomías.

  8. Hace un tiempo escuche colgado en un blog el diálogo que tuvo Magdalena con el abogado de «los abuelos» que acusan a Enestina de Noble de haberse apropiado de sus nietos nacidos en cautiverio. Si alguien tiene el link al audio, por favor, cuelguenló porque la muestra en todo su esplendor…

  9. La Patria Chacarera hacía como Nestor y Cristina en Rio Gallegos. Calladitos y en lo suyo.
    Cuando la biaba viene pareja, nadie levanta cabeza, cunado te quieren agarrar de punto, ahí cambia.

  10. Mi información era parcial, efectivamente. No era falsa, pero le faltaba una parte, y debí documentarme antes de poner eso. A eso me refiero en el comment 99 de la nota a la que se refiere Guillermo Lagos. Lo que también implica que la visión de Ruiz Guiñazú que presenta aquí Guillermo Lagos no es menos parcial que la que tuve yo, por lo que corresponde también situarlo entre «los que perdieron la memoria».

  11. Diego: estaba hablando de una periodista a la que debo reclamar equilibrio, conocimiento profundo de los temas y objetividad, porque cumple con el deber de informarme.
    ¿Qué tiene que ver con todo lo que pusiste?. No se.

  12. por lo de «defendió enceguecida este gobierno y luego entendió la realidad».
    y por las decenas de comentarios que hiciste en otras entradas.

  13. Balvanera, no puedo hablar por mi tocayo. Mi transcripción de las declaraciones de MRG fue motivada al leer su comentario (el suyo):

    Diego, a mí lo que me preocupa es lo que hace Ruiz Guiñazú ahora, no lo que hizo hace treinta años, o no tanto. Si recordé su actuación durante la dictadura fue exclusivamente en respuesta a esto que escribe Guillermo: “mientras los Kirchner estaban tan lejos de Buenos Aires como era posible, haciendo baldes de guita ejecutando hipotecas y borrando el pasado ‘militante’, Magdalena Ruiz Guiñazu arriesgaba el pellejo criticando al gobierno militar”. No soy dado a andar revolviendo miserias del pasado, pero si alguien, poníendose justamente a revolver el pasado, quiere venderme gato por liebre, tengo derecho a no dejárselo pasar.

    Parecería que esa liebre es liebre, no gato. Yo le tengo gran respeto a MRG por lo que hizo en esa época. Si sus opiniones despues han sido o son distintas a las suyas, las mías, o las de quien sea, son opiniones. Se disiente, y basta.

    En cuanto a su insistencia sobre el tema Martínez de Hoz y MRG, Ud dice que recuerda oírla hablar apoyando la política económica de M de H tras el golpe militar, al principio de la dictadura. Puede haber pasado, pero a veces uno recuerda con certeza cosas que no ocurrieron. Y suponiendo que pasó, es más que evidente que una vez que empezó a hablar sobre los desaparecidos, a fines del 76/principios del 77, y empezó a recibir amenazas, que incluían a sus hijos, cuesta creer que se hubiera dedicado a alabar a M de H. En cuanto a que se refiriera a él como’Joe’ (recuerdo de otros, no suyo. ‘Dicen que a Cristina le gusta…’ Mejor atenerse a lo que uno sabe por propia experiencia), es posible que, por edad y círculo social se conocieran, como todo el mundo conoce a mucha gente con la que crece o es pariente. De ahi a asumir que todo el mundo, de adulto, esté de acuerdo con lo que piense o hagan sus parientes, amigos del barrio o compañeros de colegio es otra historia. Y si vamos a entrar en que todos los oligarcas son iguales y no piensan, solo actuan por instinto de grupo, no hay que indignarse ante la teoria de que todos los que van a la plaza son bestias alquiladas por un choripan. Una lleva inevitablemente a la otra. Yo prefiero creer que la gente tiene diferencias de criterio, y libre albedrío a un cierto grado.

    En lo que a mi me concierne por lo que YO escribi, dejemoslo en que la liebre era liebre.

  14. me parece lo siguiente:
    1) dentro del rol de los comunicadores de ese momento, lo de MRG merece mis respetos.
    2) yo tengo 32 pirulos, soy «hijo» de la dictadura, digamos, generacionalmente. No viví esa época, pero a medida que pasa el tiempo, me dá la impresión que salvo honrosas excepciones (quito las víctmas directas) nadie sale bien parado de esa época. Es mi impresión. Nadie quería saber mucho. Incluso el presidente de la CONADEP, Ernesto Sábato, tuvo un papel realmente indigno.
    Hoy MRG podría hablar de Julio López, de Gerase o de Poud. Podría hacerlo, opta por hablar de otras cosas.
    Lo que quiero decir es que la política más fuerte, con mayor densidad, del gobierno de Néstor Kirchner fue su política de derechos humanos, que es fundacional. Es desde el Estado que se repara por lo que hizo el mismo Estado. Se pide disculpas y se procede a descolgar un cuadro, a derogar las leyes de obediencia debida y punto final, a enjuiciar a los responsables con vida, y da apoyo a las abuelas para que puedan recuperar a nietos robados. Esto sucedió. Es un hecho. Eso es política de Estado.
    Es cierto que quizá sea más facil (por decirlo de alguna manera) poder hacer todo esto ahora que en la época de Alfonsín o Menem. Pero recordemos que no era una propuesta predominante de los candidatos del 2003. Con Menem esto no pasaba, Con Rodríguez Saá esto no pasaba, Con López Murphy esto no pasaba.
    Pasó con Kirchner. les adjunto una referencia de Kirchner al respecto realizada en Carta Abierta:

    «Luego explicó que asumió la presidencia con apenas el 22 por ciento de los votos. La Plaza de Mayo estaba llena de gente que quería comer, que había perdido toda esperanza. Personas importantes de mi partido se reunieron conmigo y me plantearon que iban a poner un corte a los juicios por el terrorismo de Estado. Les dije que no me quitaran la posibilidad de que yo capitalizara ese gesto fuerte, que esperaran. Por suerte me creyeron y me dieron tiempo. No podía contar lo que pensaba porque me echaban en dos o cuatro días.»

    está todo bien con MRG, pero si le das crédito a ella, dale un poco de crédito a NK. Sino me suena medio berreta el asunto.

  15. Como le decía en el último comment de mi nota, le agradezco haberme hecho ver que estaba equivocado, o, para ser más preciso, que tomaba sólo una parte de una realidad como si fuera toda esa realidad(en este caso la conducta de MRG durante la dictadura). Insisto, de todos modos, en que lo que cuenta, a efectos de lo que estábamos discutiendo, es lo que hace ahora. Y no hablo de complicidades ni de nada parecido: hablo de ciertos discursos, de ciertas visiones, que la gente compra a los medios sin que se le ocurra revisarlos, como si recibieran la clave de todo. Y el de Ruiz Guiñazú es sólo uno de ellos.

  16. Diegus, creo que el uso de la palabra ‘capitalizar’ dice todo lo que pienso de Nestor Kirchner. La muerte atroz de 30000 personas no se ‘capitaliza’. Nelson Mandela no hubiera usado esa palabra. Ya se que Kirchner no es Nelson Mandela, pero siempre se puede buscar un ejemplo si se tiene ganas. Y espero que nadie empiece con ‘esto es la Argentina, che, somos como somos, es lo que hay.’

  17. Guillermo Lagos: creo que entendiste mal, NK habló de que lo dejaran que él «capitalizara ese gesto fuerte» de cortar los juicios a militares que supuestamente pensaba hacer el duhaldismo. No de «capitalizar los 30000 desaparecidos».

    Saludos.

  18. Rafa, no entiendo la explicacion, o al menos no me cambia la opinion. En cualquier contexto relacionado a juicios a militares, inevitablemente asociados con la muerte de 30000 personas, el uso de la palabra ‘capitalizar’ me parece terrible. O al menos revelador.

  19. no seas lineal guillermo, y te lo digo casi con cariño. Kirchner buscaba engañar a sus interlocutores, y para engañar bien, hay que utilizar el vocabulario de los engañados. Se entiende? decime que si, al menos. no se, decile maquiavélico; correlo por el lado de que comunica mal, que es paranóico, lo que sea. pero decime que entendés que no buscaba «capitalizar» la muerte de 30.000. Son peligrosas tus interpretaciones. Pobre MRG.

  20. Guillermo: es muy claro, el corte a los juicios hubiera sido un acto político, y en política los actos que salen bien se «capitalizan», o de lo contrario se «paga el pato». ¿O acaso Lilita no quiso «capitalizar» el triunfo agrario subiéndose al palco de Palermo?

    No sé si será terrible o revelador, pero el lenguaje de la política es así. Saludos.

  21. Diegus, nunca he estado muy de acuerdo con Jauretche, pero siempre recuerdo esto: ‘Si le explican algo una vez y no lo entiende, pida que se lo repitan. Si sigue sin entender, empiece a sospechar.’ O palabras parecidas. No sospecho de vos, pero si de Kirchner en ese tema, desde hace tiempo.

  22. Guillermo: esas palabras no eran de Jauretche sino de Scalabrini Ortiz refiriéndose a los asuntos de la economía. Con todas las críticas que tengo hacia los K, y con todo respeto, lo tuyo me hace acordar de ese dicho italiano: «piove, governo ladro; non piove, governo ladro».

    Saludos.

  23. Creo que no voy a poder salir de este blog. Rafa, la politica no esta por encima de la etica, o a lo que quieras llamar las reglas, principios y valores que nos hacen juzgar lo que esta bien y que esta mal. Si NK creia que era moralmente necesario hacerlo, era suficiente. ‘Capitalizar’ en el contexto de los juicios es repugnante. Si no estamos en el terreno de la frase de Oscar Wilde, hay gente que sabe el precio de todo y el valor de nada.

  24. Diegus:

    1) En gente que declaro haber sido arrestada cuando no lo fue.
    2) En gente que ‘militaba hace treinta años’, o sea 1978, cuando no era el caso. Esto ya fue mencionado en el blog.

  25. Me parece muy extraño que lo haya llamado Joe por la radio, diría que es un invento.
    Hace 30 años no había gestos de familiaridad entre funcionarios y periodistas en público. Además los que aceptaban entrevistas por radio eran funcionarios menores. Yo tenía 18-20 años en esa época, pero podría casi asegurar que MDH jamás salió por radio en algo que no fuera un discurso por cadena oficial, o la transmisión de una conferencia de prensa(no se si hubo). Si había entrevistas para medios gráficos, donde recibía ceremoniosamente al periodista en su despacho y después salía en el diario. Todo era más solemne, y un ministro de Economía era un tipo muy importante como para atender a un periodista por radio, y menos que lo trataran por el sobrenombre,(aunque en privado se trataran así)

  26. Balvanera. tan querido, ya me avisaste que soy bruta, insoportable y gorila, así que no vas a tener que molestarte en repetir eso, pero como en esta página creo que no podés cortarme, te hago una pregunta. Si lo que hizo Magdalena Ruiz Guiñazú en los 70, que estuvo espectacularmente bien en su momento, no te interesa o califica lo que opines de ella ahora, no encontrás tu actitud curiosamente parecida a la Ley de Punto Final? Pregunto, nada más.

  27. Alguien dijo que la sra ruiz,elogiaba a este gobierno????Qué notable ,cómo perdí la chance de escucharla….!!!Habrá registros de tamaño desatino????
    En Continental imposible.La emisora, en función de sus patrones españoles tiene una posición opositora a ultranza.No hubiera sido contratada.
    En Mitre,cuando yo sintonizaba..NO LE OÍ JAMÁS UNA LÍNEA DE COMPRENSIÓN ,SIQUIERA.Más, sus cruces con los Fernández eran desopilantes…plenos de mala leche ,eso que no había soja de por medio…

  28. Guillermo: ahora me hiciste acordar de una frase de Nietzsche: «no hay hechos, sólo interpretaciones» (que humildemente, de los hechos yo la extendería también a las palabras). Si vos querés darle validez universal a tu interpretación de esa «capitalización», dudo que lo consigas, conmigo no lo lograste.

    Saludos.

  29. Dolores: si hay que reconocer algo lo reconozco, no hay problema. Y en cuanto a si lo que alguien hizo antes califica o no lo que hace ahora, diría que sí pero que no agota la cuestión. Uno puede tomar en consideración ambas cosas y evaluarlas. Por otra parte, y esto es lo más importante, no estaba evaluando a una persona sino a ciertos actos. Unos estaban o están bien, otros estaban o están mal, o más o menos, según en qué contexto y etcétera. Lo que hay que ver es cómo funciona.

  30. Que veracidad tiene la historia esta de que «personas importantes del partido» (o sea, Duhalde) querían poner un corte a los juicios a los genocidas? Porqué creería Duhalde que les convenía hacer eso? Porqué habría de creer que podían «capitalizar» una amnistía o lo que fuera? Alguien podía creer que esa medida sería vista como positiva? Tan positiva que podía producirse una discusión entre Duhalde y Kirchner sobre quien debería capitalizarla? La decisión de Kirchner de instigar los juicios a los genocidas fué muy hábil políticamente (además de honorable). Pero venir con una historia de que tuvo que engañar a Duhalde para poder salvar los juicios suena a fantasía.

  31. Antes se decía que los políticos dicen una cosa y hacen otra. En el caso de Kirchner pareciera ser al revés. Le critican, no lo que hace o hizo, sino lo que dice.
    Muchachos, dejen de decir pavadas. Cualquier cosa les viene bien, para pegarle a los Kirchner.

  32. Para Rafa, si no hay hechos, solo interpretaciones, entonces lo que hacian los torturadores tambien esta abierto a ‘interpretacion’, y el general Menendez entonces tiene razon porque, desde su interpretacion, matar guerrilleros era un hecho necesario para el funcionamiento del estado. Como el y mucha gente lo entendia. Hay hechos que son hechos. Te podras hacer toda la supercheria verbal que quieras, encontrarte todos los filosofos que te justifiquen la frase de Kirchner, pero no cambia la realidad= los hechos que, como decia Peron, es la unica verdad. Alguien que puede usar la palabra ‘capitalizar’ en relacion a los juicios, ya sea porque se supriman o se reabran, o aun si se refiere a ‘capitalizar’ el acto politico de otro que involucra a los juicios, es un ser despreciable, porque crimenes de ese calibre no se ‘capitalizan’de ninguna manera.

    Para mi. Mi interpretacion.

  33. Político Aficionado:

    Nada que ver. Estaba diciendo que dentro del epriodismo «independiente» argentino hay muchos casos de aduladores de la dictadura que se colocaron como demócratas de avanzada dejando a Sábato en un pequeño lugar.

  34. Que revuelto que se puso este post viejo. Parece que no se puede hablar tranquilo.

    Yo rescato lo que hizo Ruiz Guiñazu durante los años ochenta. De lo que hizo durante la dictadura no puedo hablar por la sencilla razón de no estar presente para poder escucharla.

    Podrá haber colaborado y hasta elogiado la política económica de Martínez de Hoz, en todo caso, nuestra prensa tuvo dos actitudes a nivel oficial durante esa época. O callar y hacer programas pasatistas o ser apologistas y hablar de la «campaña antiargentina».

    Claro que hubo otros casos. Por algo hay un centenar de periodistas desaparecidos y también hubo gente como Eduardo Aliverti y Liliana Daunes que en Continental criticaban al Proceso. Pero en general, la prensa fue un aparato del Estado más druante la noche de la dictadura.

    Pese a rescatar lo que ha hecho Ruiz Guiñazú en el tema DD.HH hay algo que sí se le puede (y debe) criticar y es nunca haber dicho nada sobre los hijos de Ernestina Herrera de Noble. Lo que es bastante contradictorio si se piensa que es la periodista símbolo de los Derechos Humanos. Tampoco dice nada sobre las condiciones de laburo en Clarín y Perfil y es una abanderada de la patronal, trabaje para quien trabaje.

    Por último su defensa corporativa del Grupo Clarín es insoportable e insostenible.

    Hay rumores que hablan de que ella se dirigía a Martínez de Hoz con el apodo cariñoso de «Joe». No sé si es cierto o no, pero los rumores están.

  35. Dolores: ¿tenés alguna duda de que el genocida Menéndez no está convencido de la verdad de su «interpretación»? Por supuesto que los hechos existen, así como existen las interpretaciones que hace cada uno, y no pienso extenderme en ejemplos. Para bajar de las nubes de la alta filosofía, en mi opinión, todas estas elucubraciones sobre lo terrible de la palabra «capitalizar», son un ejemplo en el que «se da por el pito más de lo que el pito vale», con tal de agarrarse de algún argumento.

    Guillermo: reitero lo que le respondí a Dolores, agregando que a las percepciones de los torturados podemos sumarle las de los torturadores, que seguramente se sentían cumpliendo un deber hacia Dios y la Patria, además de dar rienda suelta a su sadismo.

    Saludos.

  36. Julian, en serio conocia a Martinez de Hoz y le decia Joe? Que hija de puta! Por mas que se lo hayan prsentado como Joe, en cuanto se dio cuenta de lo despreciable que era tendria que haber hecho como yo. Mi vecina mato al marido, que era un tipo buenisimo. Cuando volvio de la carcel yo no la llame mas Lola, como hacia antes. La llamo por el numero de documento. Hay gente que no tiene nombre.

  37. El post de Eva Row sobre el contrapunto de Magdalena y Pablo Llonto les dirá más de esa señora que todos estos posts. Efectivamente, lo llamaba a Martínezde Hoz «Joe» por la radio. Pero eso es una anécdota. Pregúntenle a Ruiz G qué opinaba en su momento de los bombardeos a Plaza de Mayo, de los fusilamientos del 56, en fin. MRG no es ni mala ni buena. Es un buen producto de la alta burguesía argentina. Eso sí, se levanta todos los días temprano, al p…, según mi apreciación. Hoy día es más patética que Macaya Márquez, Silvio Soldán y Johnny Allon, todos juntos. Escuchen la charla con Llonto. Es imperdible.

  38. La sra Maddalena ruiz guiñazu.siempre se «entendio muy bien con las clases oligarcas, y tuvo fluida relacion con funcionarios de la dictadura , si es extraño .es que haya formado parte de la conadep,RECUERDO,TAMBIEN .UN PROGRAMA que ella tenia con carlos burone. amigo de los carapintadas realmente impresentable

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