Uniendo los puntos…125, 126, 127, su ruta…

Este post se debería escribir después del jueves o viernes. Con los resultados de la votación por la nacionalización de fondos de las AFJP en el Senado (la “126”) en la mano. Hacerlo en este momento es anticiparse. Pero los tiempos de la blogósfera son perentorios. Y dado que el post del Escriba sobre el libro de Llonto es afín a este post y el viernes ya tendrá olor a rancio, mejor me apuro.

 

125 = Mal.

 

Políticamente mal. Sólidos los fines; débiles los medios; flojos; extemporáneos. Dejar que los Biolcati se agrupen con los Buzzi(os). Dejar que se apropien de la simbología “campo”. Dejar que caigan dos gotas de sangre y en segundos tener un cardumen de tiburones al acecho: Prensa. Campo. Grupos financieros. Opinión pública. Ver como la UIA, quizás una de las mayores beneficiaria del modelo, se limaba las uñas mientras el gobierno de desarmaba en explicaciones sobre lo que ganaba un chacarero antes y después de las retenciones móviles. En fin. Una lágrima.

 

Asumamos que la votación en el Senado por la 126 va a estar bien. Que el oficialismo se lleva los votitos necesarios no sólo para convertir el texto en ley sino para permitirnos revivir la sensación de éxito de ver a la Bullrich arrasada por encima por el tanquecito previsional de María América. O el patético show de la Unión de AFJP’s a las que las llamamos por teléfono para decirles que cortábamos el servicio y la telemarketer Palla nos devuelve la evidencia misma del choreo, en bandeja de plata: servicio con comisiones mínimas, sólo cuando haya rentabilidad positiva?!?!

 

Entonces…

 

126 = Bien

 

Supongamos que el post de Escriba hoy lleva a la “127”: nueva ley de medios.

 

Ahora juguemos a unir los puntos: tenemos dos ejemplos bárbaros de triunfo y derrota en aproximadamente el mismo contexto y en el término de semanas de diferencia.

 

Qué se necesita para que la “127” sume al SI, al ARI Fueguino, al monobloquista Lozano, a la UCR K…cómo habría que operarlos para tenerlos de este lado? …

Cómo operar el piquete mediático…? qué voz contraponerle cada mañana a Magdalena (Grupo Oscurín), a Castro (Grupo Prisa), a TNembaum?

 

Es el mismo escenario? La «gente» lo percibe igual? Aprendimos algo?

 

Tiré la piedra. Ahora escondo la mano.

11 comentarios en «Uniendo los puntos…125, 126, 127, su ruta…»

  1. El otro día lo charlábamos con compas bloggeros. La 127, la ley de Radiodifusión, no es lo mismo que ninguna de las anteriores. Movilizar se moviliza. Pero lo jodido va a estar adentro del recinto. Hay que ver cuántos se animan a levantar la manito contra Prisa, Clarín en año electoral o cerca. O aunque no lo fuera.

    No sería sencillo operar para atraer al SI, a la UCR, porque del otro lado el poder de lobby no es, ni cerca, parecido al de las AFJP. Incluso arrancamos unos pasitos atrás, porque habría que convencer primero a los nuestros.

    Buen post. Saludos.

  2. Sea cual se la táctica que se adopte para el momento de la «127», supongo que el pre-requisito es iniciar ya una campaña de desintoxicación, suave, no muy rimbombante, pero sin pausa, ehibiendo los «intereses permanentes» de las empresas periodísticas. Carpas de esclarecimiento previas. Pero, estimo, lo mas probable es que el proyecto salga consensuado con clarinete. y ya sabemos entonces qué saldrá…

  3. Contradicto: espero que se repitan sus posts.
    Coincido con Tomás. Y aparte, pienso que la idea será que es arriesgar mucho antes de las elecciones, después de que parecía que perdías por goleada histórica y ahora empezaste a descontar.
    Un abrazo

  4. La veo muy compicada a la 127. La única forma sería hacer un pacto con Carrió y Macri… y auún asi es dificil nose. Cada dia que pasa siento que Clarin tiene más poder

  5. No sé qué será peor. Pero dejar la máquina de producción de sentido y de símbolos a estos monos con navaja me parece terrorífico. Y espero que a nadie se le ocurra hacer un «Pacto de Olivos» con estos nenes. Así que adelante con la 127, los «pequeños y medianos» medios de la BPA (ARBIA) están con los tapones de punta para que salga.

  6. En otro post de hoy, se muestra muy bien la enfermedad del mercado como la que coloca al dinero en el pedestal de los dioses. Es ver un solo aspecto del problema, esquivando un poco el lado de la enorme utilidad y servicio que presta la moneda tanto en el capitalismo como en el socialismo.
    En este post noto a groso modo el juego de la política en el que todo se ve en términos de ganar o perder (¿votos?), o en términos de imponer la voluntad de grupos que maniobran. Es una enfermedad parecida, pues de nuevo es ver solo esa mitad de la realidad que nos puede llevar al falso concepto de que TODA la política es una porquería. Y realmente no es así. La Política (con mayúscula) no debe plantear la realidad en esos términos de pérdidas y ganancias, sino en terminos de compatibilizar intereses, en buscar la razonabilidad, en respetar los derechos e ideas ajenas, en tener y respetar buenas instituciones. Y mucho más

  7. Perdón, Horacio AC, ¿Usted juega a perder? Hagamos un ejercicio.
    «Yo creo que una nueva ley de radiodifusión es imprescindible para mejorar la calidad de la pobre democracia que tenemos. Me planteo cómo lograr mi objetivo (pensando en el bien común, no me atribuya otras intenciones, Usted – por ahora – solo me conoce por mi discurso), articulo las alianzas necesarias (mejorando, o concediendo en puntos que no terminen por desvirtuar mi objetivo) y me propongo las tácticas que considero, en función de la situación objetiva (relación de fuerzas, también se llama) como las más pertinentes para alcanzar mi propuesta.»
    ¿o acaso,en el altar del «consenso», debo vaciar del contenido que le asigno a mi propuesta? Suena como querer reemplazar el método de elecciones democráticas por un ágora en el que nos sentaríamos a discutir hasta consensuar…o hasta que el que tenga que ir a trabajar mañana se vaya a dormir, y entonces los que se quedan (por aguante o por que no laburan) deciden. (Método, dicho sea de paso, muy conocido en el ámbito universitario).
    Supongamos un referendum para despenalizar el aborto, y gana la propuesta despenalizadora , qué sé yo, 54 a 45. Nadie negará que el 45 es representativo, muy importante. Pero, debo «consensuar», renunciando al contenido de la propuesta ganadora. Eso, mi estimado es inmovilismo, doctrina muy cara a los sentimientos de aquellos que quieren que todo siga como está.
    Asi que: a proponer, pelear con armas leales por lo que uno cree, y contar los porotos.
    Saludos

  8. Trabajar, trabajar y trabajar. Como Rodríguez Saá. Gestión, gestión y gestión. Echar un par de tipos. Cambio de Gabinete en Diciembre. Reunión de Gabinete, conferencia de prensa, sandwiches y masitas a los periodistas. Amor. Reunión con Macri para ver eso de no-sé-qué-créditos para la ciudad. Afrancesamiento. Telermismo. Más Ginecismo. Hacerle tirar a uno del SI la bola de la ley que legaliza el aborto. Discutir seis meses eso. Sacar un par de leyes para conservar el empleo. Sumar, sumar, sumar. Colectoras. Más amor.
    Saludos

  9. Udi: Gracias por contestar:
    Lo que es seguro es que juego a decir la verdad. Juego a imaginar un buen proyecto y a proponerlo, a discutirlo, a hacer docencia, a crear ciudadanía. Y si veo en otro proyecto mejores cosas, a adoptarlo. Lo contrario es lo que hacían los milicos de los cuarteles del interior ante las asonadas militares: Se quedaban en el medio y esperaban hasta ver claro para donde se inclinaba la balanza para plegarse. En política eso no se debe hacer (creo). Hay que discutir para imaginar que es lo mejor. Se que el tiempo no es infinito, Lo racional no es jugar a ganar como en un partido de fútbol.
    Nuestra sociedad no tiene aun las herramientas del consenso. Hay que crearlas. Pero si un problema puede tener solo UNA de dos soluciones, sí en ese caso debe adoptarse la mayoritaria. Por ejemplo: hay solo dos lugares aptos para hacer el puente sobre el río y uno hay que elegir: opino que hay que adoptar el mayoritario aún cuando gane por 51 a 49 %. Lo fundamental es el análisis previo de las diversas opiniones. Ganar no debe ser el objetivo de ningún gobierno.
    Horacio ac

  10. Continué pensando para ver mejor la escencia de la diferencia:
    Creo haber descubierto que las soluciones sociales deben discutirse a fondo, NO tratando de ganar nada, sino de adoptar la mejor. Pero si finalmente la que menos me gusta resulta con mayor consenso (bien medido) la voy a aceptar con gusto. No me asustan los errores mayoritarios, son el mejor maestro.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *