En el día del reposo y el asado (o los ravioles), quienes gozamos del arte de la política solemos relajarnos intentando balances. Sobre el hecho político de la semana –CFK marcando la cancha- Verbistky propone moderar las emociones; Wainfeld suavizar los análisis. Aceptando que sin haber podido leer a sus colegas antes de escribir, Morales Solá sostiene que tanto Cristina como Moyano están asustados; Van der Kooy que el líder de la CGT ve en La Cámpora a sus peores enemigos. Un argumento sintonizado más finamente es, en cambio, éste. En medio de la polvareda, Tiempo nos recuerda que hay unos pocos casos donde ya se reparten las ganancias.

En cuanto al variado escenario político criollo, Clarín avisa que Mariotto arma en el conurbano y que Macri arma un multimedios; Tiempo que Urtubey se fotografía con Marcela Noble Herra; La Nación que Scioli tiene problemas de caja; Página relata el entierro de Bussi y Dillon los diez años del ARI. Ah, parece que en la CABA quieren hacer (mucho) más fácil la demolición de construcciones anteriores a 1940.

Una rápida mirada de la sección no argenta del planeta muestra que allá afuera también pasan cosas, sobre todo en las plazas. En Egipto, la juventud facebookeana hace su segunda revolución, sin jefes ergo sin órdenes pero con muchos riesgos. En el Norte, Occupy Wall Street sigue creciendo: aunque algunos son aún escépticos, una importante firma lobbysta le sugiere a la Asociación de Bancos de USA comenzar a ocuparse y preocuparse de estos hippones indignados que se atribuyen representar al 99%. Mientras, la (coordinadarepresión de esta semana lleva a Wolf a concluir que se trata de la primera batalla de una naciente y próxima guerra civil. Además, los okupas logran un primer, aún si todavía modesto, triunfo electoral.

Pero en fin, antes de la siesta, una serie de buenas noticias y análisis: se publica un libro sobre la Ley de Medios; en Brasil piden por una de esas y por un diario de izquierda; van 269 créditos del Fondo del Bicentenario; se inicia una demanda en Argentina por los crímenes del franquismo; parece que Marpla le quiere (y puede) competir al Sillicon Valley; la Unasur comienza a activar obras públicas imprescindibles (queremos muchas más, por favor); siguen las movidas para y por revisar ideas importadas; y -a no olvidar donde empezó todo- una entrevista sobre el futuro de Internet, incluyendo (y terminando en realidad –y con disculpas- con una potencial mala noticia) la amenaza de control y censura que representa la Ley SOPA, promovida en el Parlamento de China -no, perdón, de Irán – no, me equivoqué, es el de USA.

Acerca de Napule

es Antonio Cicioni, politólogo y agnotólogo, hincha de Platense y adicto en recuperación a la pizza porteña.

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7 comentarios en «»

      1. Es la vocación del poder autoritario atraer hacia su ámbito el pensamiento y la palabra públicos, copar el espacio público, para convertirlo en su espacio privado. Esta es su tendencia, que nunca logra concretar completamente, pero se insiste en ello y es la permanente amenaza que existe en toda sociedad, aún en las democráticas.-
        En China e Irán, no existen límites para ese poder. En los Estados Unidos, los límites existen en su sistema institucional, aunque no dejan por ello de violarse, a veces con consecuencias para el poder, en otras, no.-
        Se hace difícil denunciar esas violaciones en Irán, China. Un Chomsky por esas tierras es casi imposible.-
        Particularmente no me gustaría vivir en ninguno de esos tres estados. Me quedo con el mío y trato de que no se contagie.-

    1. Buenos articulos, Daio, gracias. Para los que no lo leyeron, del primer articulo sobre China: “El gobierno dijo que las medidas, que entrarán en vigencia el 1° de enero, apuntan a eliminar «el exceso de entretenimiento y las tendencias vulgares» (…) Anteayer, el Comité Central del Partido Comunista convocó (a) la creación de «un sistema de administración de Internet» que regularía estrictamente los sistemas de mensajes instantáneos y las redes sociales, y castigaría a aquellos que difunden «información perjudicial». (…) Tal vez lo más revelador sea que las autoridades debaten la posibilidad de exigirles a los microbloggers que registren sus cuentas con sus nombres verdaderos y números de documentos de identidad en vez de hacerlo con los seudónimos que actualmente emplean casi todos.

      Y del segundo sobre China: “ Internet es hoy, según el narrador del video, «un campo de batalla importante para la ideología».”

      Tengamos en cuenta que en Europa tambien se han hecho ya menciones oficiales a un «DNI para Internet». Slds.

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