Ante la crítica situación en Bolivia, me parece interesante plantear qué tipo de actitud deben tomar los países amigos. Chavez ofreció ayuda militar, lo que no fue muy bienvenido por el ejército boliviano. Cristina convocó a una reunión urgente de Unasur para mañana, ver aquí . De algún modo se repiten las posiciones que encontramos hace poco en el conflicto entre Colombia y Ecuador. De allí el título de esta entrada: ¿Respuesta diplomática y/o apoyo armado? Mi posición es que lo central es la respuesta diplomática, pero jugada a fondo. No soy ningún experto en cuestiones de este tipo, así que no puedo mencionar qué es lo que habría que hacer exactamente desde el punto de vista diplomático, pero la reunión de mañana, me parece importante como primer paso. Creo que la violencia es el juego de ellos, cualquier intervención de otro país, da pie a que Estados Unidos tenga más excusas (como si las necesitara, me van a decir, pero igual prefiero que no las tenga), para actuar desembozadamente. No rechazo los gustos que se da Chavez, pero lo que puede salvar a Bolivia es la diplomacia. Si hay fuerzas armadas indecisas en Bolivia, deben ser presionadas con el apoyo internacional a Evo. Aparentemente Uribe asistiría a la reunión de mañana. Para mi su presencia es más importante que la de Chavez, el apoyo de este, lo descontamos todos. Mientras que la presencia del colombiano (insospechable de “zurdo”) le da una cobertura más difícil de socavar. La respuesta armada, si es necesaria, tiene que ser interna y en base a la ley. Además de la coyuntura, este debate me parece interesante, porque creo que tiene que ver con el modo de transformar nuestras sociedades y con situaciones que lamentablemente parece que van a surgir en más de un país. La parte positiva es que la unión latinoamericana es más fuerte que en ningún otro momento de la historia y eso hay que aprovecharlo.
Concuerdo con que Chávez debiera dejar de pensar en las elecciones venezolanas cuando hace política exterior. Pero hay un tema: las milicias de la Media Luna se están preparando para un desafío armado hace tiempo. Y ello puede llevar a una situación en que la diplomacia no alcance. Ya sabemos que una intervención externa debe evitarse, pero, en el caso de que el gobierno constitucional no tenga la capacidad de recuperar el monopolio de la violencia -y sólo en ese caso- hay que acelerar los procesos diplomáticos que permitan enviar una fuerza de paz de UNASUR, no de la OEA. En ese sentido, me interesa la línea brasileña, más que la colombiana o venezolana.
Creo que la respuesta de Chavez viene bien para hacer ruido y para que sea más evidente la alevosía con que Estados Unidos desestabiliza la región.
Por supuesto que la verdadera solución deberá ser diplomática, pero un poco de escandalo viene bien.
Acá lo importante es lo que diga Lula. El resto puede acompañar.
Acá lo importante es lo que dijo Cristina, que NO lo dijo Lula:
“… me parece que no hay que dejar pasar más tiempo. Todo indica que la fragilidad institucional en Bolivia es muy grave. Voy a hablar con Michelle y con Lula para ver si podemos reunir a la Unasur cuanto antes”, «Si no actuamos ahora –dijo la argentina–, dentro de treinta años podemos estar viendo documentales como los que vemos ahora sobre la caída de Salvador Allende”.
BIEN CRISTINA, BIEN
Coincido con Eva en que la actitud de Cristina al impulsar la reunión es digna de ser remarcada. Es cierto que luego, la opinión de Brasil como “líder regional” será muy importante y también que la prefiero a la de Colombia, mi mención de Uribe solo apunta a que es bueno que incluso él apoye, de hecho habrá que ver si finalmente va y qué es lo que dice. También acuerdo en que si es necesario enviar una fuerza de paz, es importante que sea de UNASUR y no de la OEA, creo que en general, la reunión de mañana tiende a acentuar el protagonismo de UNASUR y reducir el de la OEA, como lo dice el mismo artículo de Página. Algunos “desboques” de Chavez en el plano internacional, parecen asimilables a los de D’Elia en Argentina, por un lado ponen en evidencia, de forma más clara, situaciones y contradicciones que merecen ser llevadas a un primer plano, por el otro, a veces parecen excesos funcionales al adversario político. Es un equilibrio delicado. En general me gustan las posiciones de Chavez y de D’Elia, pero en estos temas, en los que una posible guerra (civil en este caso, entre naciones cuando fue el episodio Colombia-Ecuador) no parece algo lejano, creo que no hay que echar leña al fuego.
Con respecto a lo de Chavez me parece que, en parte, funcionó el teléfono descompuesto de los medios. Chavez dijo: si Evo es derrocado y tiene que luchar desde las montañas tendría mi apoyo. Los medios bolivianos publicaron: Chavez quiere mandar tropas. Los milicos reaccionaron a lo que dijeron los medios más que a lo que dijo Chavez. Igual Hugo tendría que cuidarse un poco de lo que dice.
Con respecto a Lula estoy de acuerdo con Mariano. Aunque me parece que a Brasil ese papel le viene quedando grande últimamente, buena parte de sus elites están más interesadas en que los europeos y los yonis los traten como uno de ellos que en liderar a la región, lo implica responsabilidades y, por supuesto, costos.
A mí en cambio me pareció contundente que Chávez hiciera su papel de provocador, disparó una medida justa del dramatismo. Y Cristina reaccionó impecablemente, yo también estoy de acuerdo en que ella haya puesto el dedo en UNASUR y no en la OEA, estoy totalmente de acuerdo con Sergio. Por fin se va a constitur la verdadera unión sudamericana en torno a los actores verdaderos y no en junta con los que nos ayudan a sepultar nuestro destino independiente. La de mañana podría ser una cumbre de esas que quedan signadas como precedentes de la historia.
La comparación con la situción de Chile en la época de Allende que hizo Cristina, es toda una conceptualización del conflicto que pone los parámetros en la ingerencia de EEUU en aquella fatídica época, y en la decisión actual de evitar que eso vuelva a suceder.
MUY BIEN CRISTINA
Para Chubutense, no tengo claro si le reprochás a Brasil que no quiera meterse en problemas de países vecinos. Por otros comentarios me parece que, si quisiera meterse, se diría que está actuando sobre la base de una estrategia imperial. La pregunta en serio es: cual es el rol de Brasil en la America Latina progre?
Del mismo modo que Chavez en su ofensiva beligerante en el affaire Colombia-Ecuador apuró los tiempos diplomáticos y el pronunciamiento general de latinoamérica contra la invasión de un país por parte de otro, ahora su definición en el conflicto vuelve a apurar las definiciones del resto. La verdad, no lo veo como un problema, hay una avanzada violenta de los sectores beneficiados por las políticas económicas de los 90s y por el escenario económico actual de sobreprecios en los commodities, esa amenaza es real. Además ya sabemos cómo actuará Chavez mañana en Chile, será digno de ver como sucedió ante la resolución del enfrentamiento Correa-Uribe en la cumbre del Grupo de Río.
Lo que se espera de mañana no es sólo el apoyo de todo el Sur al gobierno democrático de Morales sino el pronunciamiento general contra este tipo de avances apoyados desde dentro y desde fuera por grupos poco afectos a la democracia cuando no los beneficia a ellos y ninguno de nuestros países está libre de sufrirlo.
Lo que me parece es que Brasil, que es por lejos el país más poderoso de la región, debería asumir una posición de liderazgo, que no parece dispuesto a asumir. Y que también implica costos y responsabilidades.
De todos modos, la repercusión de una caída de Evo sería inmediata: la carta orgánica del MERCOSUR (se nos mezclan las siglas, pero…) ya preveía que sólo podían integrarlo países con regímenes democráticos. Aunque no es probable que suceda, no desde mi punto de vista, un gobierno de facto sufriría bloqueo automático, no sería reconocido por los gobiernos de laregión, y no estaría en condiciones de defender su territorio (porque, o interviene la OEA, o interviene UNASUR, o interviene la ONU… pero alguien interviene, miren si no el caso de Haití). Yo no creo que los prefectos se muestren tan irreverentes ante una correlación de fuerzas absolutamente negativa.
Por supuesto, como había dicho Mariano T, y antes quien firma, la pelota la maneja Brasil. Esperemos jogo bonito.
Ezequiel: De acuerdo en caso de un golpe tradicional, eso no creo que ocurra de ningún modo, el tema es si persisten actitudes desestabilizadoras, qué se puede hacer contra eso. Una especie de «clima recontradestituyente», con escarceos de guerra civil. Tal vez no terminan de voltearlo pero…
En el caso de Evo, el 67% que obtuvo hace un mes, habilita una defensa muy fuerte, que ojalá comande Brasil como dicen ustedes, ya que tendría más peso internacional. Para mi es una situación que tiende a repetirse en la región, con matices según cada país, por supuesto. Por eso la reunión de mañana y todo lo que se haga respecto de este tema, me parece muy importante.
Nada desligitimaría tanto al gobierno de Evo como que una sola munición extranjera sea usada contra un boliviano opositor. Prometerle ayuda armada a los gritos es el peor favor que pueden hacerle. Chávez balandrona cual payaso y no piensa al hacerlo más que en su electorado, que ya le dió un aviso de vencimiento. Bolivia esta mal, sí, y la clave de su estabilidad es Brasil y muy secundariamente nosotros. Caerá al fin para salvarse bajo la influencia del Mercosur – el Mercosur real, liderado por Brasilia, ese Mercosur donde el Senado brasilero hace años no autoriza el ingreso de Venezuela.
Pongamos las cosas en perspectiva:
Evo tiene el poder en Bolivia. Las FFAA lo apoyan, el Congreso lo apoya. Su único problema es que en unas provincias hay una mayoría opositora, y esas provincias (o sus dirigentes) estan en contra de como salió la reforma a la Constitución y piden mayor autonomía (que es menso que la autonomía de la que gozan las provincias en yn régimen federal como el nuestro).
En una palabra, esta recontrafirme en su cargo, solo tiene un problema en una parte del país que no es donde tiene centro el gobierno. Esta mucho mas firme que Sanchez de Lozada cuando cayó, porque es mucho más grave la rebelión de El Alto, a pocos km de La paz, que la de provincias alejadas. El único daño que pueden hacer es económico, y en vidas humanas si hay enfrentamiento, pero no político.
En Bolivia, no como en Argentina, nada impide que el ejercito ponga orden, porque no esta limitado en temas internos, pero así como una matanza debilitó finalmente a Sanchez de Lozada, Evo no quiere correr ese riesgo.
En una palabra es una situación dificil, pero la cantidad de errores que tiene que cometer evo para que esto le cueste el gobierno es tan grande que es imposible que suceda.
Mariano T.: Primero decís: «El único daño que pueden hacer es económico, y en vidas humanas si hay enfrentamiento». O sea que reconocés que pueden matar gente, además de debilitar la economía. Luego: «una matanza debilitó finalmente a Sanchez de Lozada, Evo no quiere correr ese riesgo.» Ya empezamos a ver que la situación de Evo no es tan «recontrafirme en su cargo» como creés, ya que si otros matan gente y vos querés pararlos, la situación no es tan simple, esto sin contar los deterioros económicos que puedan producir. Finalmente: «la cantidad de errores que tiene que cometer Evo para que esto le cueste el gobierno es tan grande que es imposible que suceda.» Es decir, una vez más, estamos exagerando, y si llegara a ocurrir, sería… ¡culpa de él!. ¡Fantástico! Una verdadera demostración de cómo se pueden poner las cosas patas para arriba y tratar de probar que la culpa es del atacado y no de los atacantes.
Mariano T está aplicando al problema Boliviano el ideario ruralista en todo su esplendor. Fascinante poder leerlo tan clarito.
Dag: Tienen el CD grabado, a lo que venga, ponen enter y en la pantalla aparece siempre lo mismo.
En primer lugar como usual opositor quiero destacar la actitud de Cristina. La opción es la diplomacia. No se puede cuestionar al imperio y adoptar su praxis ante los conflictos.
En segundo lugar creo que el diagnóstico de cristina es errado. Para mi el riesgo es de secesión no de golpe. Pero igual es gravísimo.
Me parece que el tema va más allá de los reclamos autonómicos tradicionales en Bolivia. Una de las cosas que la constitución que Evo busca hacer votar es el reconocimiento de unos cuantos millones de hectáreas a grupos indígenas que las habitan hace bastante tiempo. En parte, esas tierras son tradicionalmente usufructuadas de forma ilegal por empresarios cruceños. Y que tienen a la gente que trabaja con ellos en condiciones que roza la esclavitud. La entrega de esas tierras, además, es obligación del estado boliviano por haber firmado tratados internacionales referentes a los pueblos indígenas. No durante el gobierno masista sino en el precámbrico, cuando «multiculturalismo» era una palabra que a los neoliberales les encantaba y se reformaban constituciones para incorporarla (por la misma época nosotros sacamos lo de «convertir a los indios al catolicismo» como parte de las atribuciones del congreso).
El tema no es menor, porque la constitución que proponen los masistas SI reconoce la autonomía en muchísimos aspectos, incluyendo el fiscal, educativo, seguridad etc. No así en cuanto a recursos minerales, que se reservan a la nación.
Entonces, poner en perspectiva, implica tener en cuenta que un gobierno que acaba de ser confirmado en su puesto por casi el 70% de los ciudadanos se propone votar una constitución que reconoce la mayoría de los reclamos históricos de sus opositores más fuertes. Con la salvedad que TAMBIÉN reconoce los reclamos históricos de las víctimas seculares de esos opositores.
Ante esto, yo no se si hablar de «recontradestituyente». La oposición boliviana ha optado por una táctica de «me opongo a todo». De bloqueo legislativo permanentre. De declaraciones apocalíticas. Y de protestas de acción directa. Hasta acá, nada de eso es muy positivo pero está dentro del juego democrático. Digamos que se está más o menos como acá hace un par de meses.
Pero hay un elemento que, acá, por suerte no hubo. Fuera de una ñapi por allá, y algún camión abierto contra la voluntad de su propietario por allí, en Argentina los actores reconocieron la existencia de límites.
En Bolivia, en cambio, existen grupos armados, y muy violentos. No existe aquí la posibilidad de que un grupo político, por más gorila que sea, se ponga a apalear gente en la calle al grito de «negro de mierda» con la disciplencia de la prensa. En Bolivia si.
Es ese elemento lo que hace la situación más peligrosa, y hace posible que todo pueda estallar.
No digamos boludeces, o te voltea la calle(en la capital), o te voltea el ejército. Nunca te pueden voltear a 500 km.
Yo puedo salir con gas sarin y matar a media Mar del plata, y que el resto salga a romper todo en la calle y con eso no volteo a Cristina.
Que los «cívicos» lo quisieran voltear es una cosa, que lo puedan hacer es distinto, es más, es mucho más facil asesinarlo que voltearlo.(ahí si que no se las consecuencias).
No opino sobre el fondo de la disputa porque me faltan elementos y recibí muchas opiniones contradictorias.
Lo que si es verdad, es que esto le viene como anillo al dedo al gobierno paraa tratar de mezclarlo con la valija y el juicio en Miami.
Lo que pasa es que los milicos allá todavía son un actor más o menos autónomo. De allí que salgan por la suya a desautorizar a Chavez (es decir a opinar sobre política), cuando lo lógico habría sido que salga Evo o que no salga nadie. Si a esto le sumás que los masistas también andan armados y no son de comerse ninguna (hay unos que se hacen llamar «ponchos rojos» y van todos calzados), si Evo falla en contenerlos se puede armar la podrida. Y ahí el ejército puede priorizar el «orden», con algún gobierno «de transición».
Lo de la valija puede ser, pero a lo mejor lo de la valija es para tapar lo del indec, que es para tapar lo del campo, que es para tapar los nexos con bin laden, etc.
Lo que está pasando en Bolivia es interesante para repensar nuestros propios debates sobre los setenta y la nefasta teoría de los dos demonios. Volvamos una mirada a septiembre de 1973, Santiago de Chile, aviones de la Fuerza Aérea bombardeando la Casa de la Moneda. Ahora regresemos a 2008, Bolivia, 15 campesinos masacrados, saqueos, sedición oligárquica, un embajador yanqui conspirando en las sombras con la oposición antidemocrática. A ver: Evo acaba de ser ratificado hace nada por el 67% de los votos en un referéndum revocatorio. Los presidentes de derecha no se someten a referendos revocatórios. Pero Evo tuvo que someterse, antes Chávez. Cuando las fuerzas populares ganan elecciones y construyen mayorías políticas y sociales, la democracia liberal se cae como ficción, porque las oligarquías no aceptan, nunca, jamás, que los pueblos gobiernen. Mientras ellos mantienen el control del sistema político, la democracia liberal es bárbara, perfecta, el mejor de los mundos. Cuando pierden, patean el tablero. En los setenta lo hicieron con golpes militares. Ahora, miremos Bolivia. Miremos Venezuela (intento de golpe militar, referéndum revocatorio, conflictividad permanente). ¿Y por casa cómo andamos? ¿Te suena Luciano?
Sí, ya sé, hay diferentes dimensiones en los conflictos y diferentes caracterizaciones posibles de los gobiernos, de los procesos políticos, de los errores cometidos. Pero el trasfondo es uno: ellos no pierden. No aceptan reglas de juego que no garanticen que se haga lo que sus intereses mandan.
La patria son ellos. El país es mío, mío, mío.
Bolivia, como antes Chile en los setenta, desnuda los límites de las posibles transformaciones sociales dentro del sistema. ¿Hasta cuándo Evo podrá aguantar sin recurrir a medidas más drásticas? ¿Tiene que dejar que le incendien el país? ¿Irse? ¿Meterse el 67% de los votos en el culo? ¿Negociar? ¿Consensuar, como decían acá, con los que desabastecen, matan y extorsionan?
Que después no me vengan a hablar de dos demonios. Que después no me la quieran contar diferente. Que quede claro cómo empieza todo.
Mariano T.: Creo que hay algunos errores en tu forma de razonar. En Argentina los estudiantes secundarios cortan una calle de la capital y los medios de comunicación arman más escándalo que cuando ustedes cortaban 300 rutas. Pero eso es porque no se puede andar jodiendo a ejecutivos que van a su trabajo. Y si no son ejecutivos, por lo menos son ciudadanos de la culta Buenos Aires. Si los perjudicados son camioneros, para los medios es como si no pasara nada. El tema no es que los problemas estén cerca o lejos de la capital. En Santa Cruz de la Sierra el PBI per capita es un 40% más alto que en La Paz, o sea que para los medios de Bolivia, donde no se jode, es en Santa Cruz. El tema siempre pasa por quién es el perjudicado, si es de la clase media para arriba, es gente que sufre sin merecerlo, si es de la clase media para abajo, ¿cuál es el problema? ni siquiera se registra que haya un problema.
Bruno, ¿Pero que tal si la permanencia de Chavez después del golpe, y la (esperemos) salida positiva de la crisis en Bolivia viene a mostrarnos, por el contrario, que se puede trascender esos límites que vos señalás?
Porque che, si no nos hacemos todos troscos y a la mierda…
Trosco, jamás.
A Evo lo banco a muerte, es lo mejor que tenemos, después del Comandante en Jefe, obvio, en su fase de lucha de las ideas!
Lo que quise decir es que esto desnuda la ficción de la democracia republicana y liberal que nos cuentan y debe ser útil para repensar los setenta. Esta historia ya la vimos. Y después nos quieren contar la teoría de los dos demonios.
Bruno: excelente ! Una cosa es el análisis, y otra las propuestas, que nunca pueden desconocer la relación de fuerzas, y los objetivos de máxima y mínima.
Bancamos a Evo, sostengo, porque de no hacerlo el retroceso sería peor que cualquier concesión que él tenga que hacer. Es necesaria la presión «por izquierda», en pos de la profundización de las medidas reformistas, pero a no confundirse y creer que es «todo o nada». Mantener lo ya logrado es un perldaño importante.
Hoy, 18:00 hs. Movilización en Rosario para bancar a Evo. Todos a La Toma !
Creo que el problema puede estallar si Santa Cruz o Pando declaran su independencia y el tío Sam los reconoce y manda tropas para defender la democracia y la autodeterminación de los pueblos.