Hebe

Ser ídolo de un club de fútbol no es una tarea sencilla. Son pocos los que acceden a esa categoría invaluable para el hincha, sin fecha de vencimiento.  Sin embargo, más allá de que el retiro de áquel que se consagró lo libera para siempre de algunos cuestionamientos que siempre hay y lo eterniza inmemorialmente, no todos los adioses permiten una despedida digna del ídolo.  ¿Cómo explicarlo? Esta el que se retira campeón y brillando, al estilo del Enzo (en menor medida, Calderón, pero no fue estelar lo suyo), o el que ve que su físico no puede más y se arrastra por la cancha, como el caso de Fernando Hierro, el gran defensor madridista, que empezó a recibir insultos en el ocaso de su carrera.  Dos situaciones extremas, que distan de ser las más habituales, caracterizadas por puntos más intermedios: aceptación de edad sin gran baja de rendimiento pero con más presencia en el banco de suplentes, alguna lesión grave que acelera una decisión ya tomada o un final siendo titular pero no campeón (muy común, ¿cuántos son los que ganan títulos?).

Hebe es una ídola, así sin vueltas. Una mina que no se quedó en la lucha y reivindicaciones exclusivas del pasado, sino que batalla el presente y construye condiciones (Universidad, construcción de viviendas, étc) para un futuro distinto, más justo, más igualitario. Nadie le puede echar en cara su acercamiento al kirchnerismo, visto y considerando que (afuera los prejuicios, que el cronista también acarrea) es el único gobierno de la democracia recuperada que recibió a las Madres en la Rosada, las abrazó y puso manos a la obra en muchísimas de las peleas que ellas venían dando infatigablemente.  La autonomía muchas veces es una falsa opción cuando realmente hay acuerdo con una política determinada. En eso acordamos y hay que dejar de fetichizar esa palabra, cuasi como un mantra que nos alivia de correr riesgos y nos mantiene impolutos. Pero Hebe se expone demasiado, queda desarmada frente a ataques de diversos frentes (a la derecha es como si le dejaras picando una bocha debajo del arco, aunque de otros sectores no se podría decir lo mismo) y su prédica no aglutina, sino que distancia. Independientemente de la ovación que puedan haber generado sus dichos en el momento respecto a la Corte, no hay el más mínimo consenso con una afirmación tan desmedida e irracional.

A ella le gusta este juego, donde parecería sentirse cómoda (el «filtro» evidentemente no forma parte de su esencia) y se vislumbra consciente de sus palabras y los efectos derivativos de las mismas. Sin embargo, cualquier observador puede darse cuenta que esa idolatría, esa admiración que supo construir jamás se va a romper, pero se desgasta. Algunos pueden pensar que el «retiro» de Hebe es a lo grande, a lo campeona, con una actividad febril en contra de nuevos enemigos (o los mismos de siempre, reconfigurados) que hacen aún más grande su eterna lucha, la que nunca se abandona. Otros preferiríamos que se guarde un poco, que batalle más en silencio (esas cosas como las que mencionábamos anteriormente que los grandes medios prefieren no ver, para sólo quedarse con lo superficial y lo que les conviene) y que los «últimos años» no sean de una innecesaria devaluación de su figura. Quizás no esté en su esencia, quizás sea un pedido ingenuo, quizás la pelota no se mancha de verdad. Quizás tenga que seguir poniendo el cuerpo de manera desencarnada. Quizás.

Uno piensa que el descanso del guerrero también es necesario y no por eso deja de ser guerrero. Los más jóvenes deberíamos entender que los palos tienen que llovernos a nosotros, no a ella. Cuidemosla. Como se cuida a los ídolos.

Acerca de Sebastopol

Licenciado en Sociología es lo que dice el título (que aún está en trámite) de Sebastián Tafuro. Un tipo al que le apasiona escribir sobre diversos temas, aunque han predominado, hasta aquí, las crónicas viajeras (http://www.viajeros.com/osorojo), el amor por la redonda en tiempos mundialistas (como Sebastiano en http://mundialveintediez.blogspot.com/), la investigación académica colectiva (por ejemplo: http://revista-theomai.unq.edu.ar/NUMERO%2021/ArtRebon.pdf) y estos esbozos de periodismo en clave político-social en este sitio, además de esos arrebatos tipeadores de todo tipo que quedan rondando por ahí sin ver la luz del mundo exterior. Me planto aquí desde un lugar honestamente brutal: con subjetividad y un estilo propio, sin proclamas falsas de la independencia como una abstracción a seguir fanáticamente, con ganas de incentivar el debate de ideas y la fuerte convicción, ambiciosa por cierto, de que Mariategui estaba en lo cierto cuando decía que "el escritor, el artista, pueden trabajar fuera de todo grupo, de toda escuela, de todo movimiento. Mas su obra entonces no puede salvarlo del olvido si no es en sí misma un mensaje a la posteridad".

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20 comentarios en «Hebe»

  1. Estimado, a diferencia del fóbal, en la vida los años suelen mejorar al jugador.
    Y voy a arriesgar la hipótesis de que el gobierno la está usando (en el buen sentido), como rotweiller, para después negociar. Algo asi como: «mirá que si no transás la suelto a la Hebe, eh »
    Pero, quizás me equivoque, y en vez de describir lo que el gobierno hace estoy simplemente diciendo lo que yo haría.

    1. Muy bien, che. Hagamoslon, repitamos esta maniobra de alta politica, no nos quedemos en la anecdota. Para reforzar el metodo: Primero, hay que calumniar sin minima prueba a los jueces de la Corte con un «turros, reciben sobres», ‘son complices de la dictadura», y despues, de taquito, una amenaza de copar una institucion de la Constitucion si no se aviene a aplicar nuestra vision de la ley, que es la verdad del pueblo, la absoluta. El exito politico esta asegurado. Solo alguien mas fascista lo podria haber pensado mejor.

      1. Tal parece que la Literalidad es un mal que aqueja a muchos.
        En cambio, cuando se trata de definir al intento de golpe de estado en Ecuador, nos ponemos sutilmente metafóricos.
        Un excelente ejemplo de esta versatilidad ética puede encontrarse en los titulares de los diarios de la semana pasada.

      2. Evidentemente no tenés demasiada idea del funcionamiento de la Justicia y del derecho a reclamarle que tiene alguien como Hebe. se le reclama a los periodistas, a los DT’s, al poder ejecutivo, a moreno, a cada unx de lxs ministrxs, se le reclama a lxs senadorxs, a lxs diputadxs, pero parece que a lxs Sacrosantxs e Intocables Supremx no se les puede decir nada que enseguida aparece la acusación de «apriete», haciendose todos los dolobus cuando Lorenzetti se reúne con Carrió, Cobos, los bogas de Clarín y Magnetto mismo.
        El Poder Judicial es el más antidemocrático de los poderes, que ha mejorado su composición de Corte Suprema en relación al del menemismo y hace lo que se le canta en el forro de las bolas.
        y encima, si les reclamás algo, te saltan con la huevada de que eso es antidemocrático…

      3. claro, hagan como el amplio abanico opositor, que tilda a los jueces de turros y de recibir sobres del gobierno, solo cuando dictaminan en contra de sus preferencias, que por supuesto, son el último bastión de la democracia y la institucionalidad.

    1. Y vos cerrás el tema por esa declaración instrascendente, y de compromiso? Te pronto de volviste una doña Rosa?

  2. Y, que hacemos comandante Piñon Fijo? Tomamo’ o no tomamo’ la Corte de los turros-golpistas-que reciben-sobres-de-Mañeto si falla en contra, eh? Y si falla a favor como halagamos a estos proceres heroicos de la mejor Corte Suprema de la Historia que le debemos a Nestor?

    1. A mí simplemente me gustaría que Hebe no saliera tan golpeada por los sectores afines y que siempre han batallado junto a ella y que la Corte no se deje presionar ni por uno ni por otro, aunque en este caso debería hacer lugar a la sanción de La Ley de Medios, tal como está planteada.

  3. Me paree que Hebe no tenía nada que hacer en ese acto. Los microfonos debían ser para Mariotto, para Tristan Bauer. A Hebe dejemosla para el 24 de marzo. Eerrores no forzado del gobierno sin sentido.

  4. Highton y Zaffaroni le quitaron importancia a los dichos de H. Bonafini, Estela Carlotto declaró que no los comparte, el gobierno no los avala y la blogósfera en general los considera desafortunados.

    Esperemos que esto sea suficiente para calmar la natural ansiedad del acendrado demócrata Mariano T y su amigo Homero.

    Sin perjuicio de ello, creo que hay un preocupante avance de la justicia, vía medidas cautelares, sobre la esfera del poder legislativo, y los ciudadanos debemos sentirnos libres para opinar sobre estas cuestiones.

    1. En ese monumento al periodismo con mayusculas que es Tiempo Argentino, Hebe B. dijo, refiriendose a tomar la Corte Suprema y arrancarles un fallo favorable, «yo digo lo que otros callan». Estoy seguro que se referia a vos y otros revolu’ un poco tibios a los que les gusta la idea de un stalinismo posmoderno de baja intensidad pero que no se animan a decirlo.

      1. qué mierda es un stalinismo de baja intensidad??

        un totalitarismo no sería víctima de que parte de los poderes del estado patearan en su contra. es impensable.

        stalinismo… qué pelotudo. mirá si a stalin un par de jueces se le iban a tirar en contra.

        mamadera… lo que hay que leer.

    2. El gobierno nacional y popular ahora le tema a la contrarevolución de los juzgados!! Los prefería cuando eran mesiánicos, cuando pasaban por arriba de todos los límites, y no ahora que se quejan de que un juez pedorro les saque una cautelar en contra.
      Pero bueno, un gobierno en retirada, ya no merece enemigos de fuste como la oligarquía. Ahora los derrotan las balas de salva de los jueces «de provincia». Ya se les anima cualquiera, y en lugar de disimular, como perro que se lo están garchando, invocan de modo tardío la división de poderes en la que nunca creyeron.

      1. sería lindo ver cómo es que el gobierno no cree en la división de poderes. al hacer memoria es claro que sus más importantes gestiones fueron realizadas vía leyes, votadas por los representantes del pueblo según los más escrupulosos parámetros de institucionalidad.

        a ver vigía si desempañamos los prismáticos.

  5. Sebastopol:

    Existe un déficit en la política de derechos humanos, y esto abarca al gobierno y los organismos de derechos humanos (los afines en particular).
    Para ser gráfico, va el ejemplo: frente al juzgado de Resistencia donde se desarrolla el juicio por delitos de lesa humanidad se agrupan manifestantes con fotos-pancartas de los compañeros caídos en Margarita Belén. Ubicados sobre la plaza central integrantes de movimientos sociales aguardan por sus reclamos ante la casa de gobierno. Hay menos de cien metros entre ambos grupos,extraños, ajenos, no hay vínculos, no hay vasos comunicantes, nadie recorre esa distancia que otrora no existía producto de una generación comprometida con la causa de los desposeídos. Veintidós “presencias” interrogan desde las pancartas.
    Algo semejante podemos apreciar en http://socializandovoces.blogspot.com/2010/08/en-la-rioja-angelelli-lo-homenajeo-el.html
    la imagen de una “chinita” que sostiene un cartel: “Pueblo es el que no oprime y lucha contra la opresión” No al Uraniom en contraste con el discurso de CFK del mismo día donde aseguró que el mártir riojano (Angelelli) “estaría apoyando a este modelo de país”.

    Siempre que los organismos de derechos humanos se subordinaron a la política, se apartaron de una visión integral de los derechos humanos. Durante el gobierno de Menem vemos que su política de derechos humanos de reconciliación y reparación apartó a los organismos de derechos humanos de formular una posición crítica de la situación socio-económica imperante, aunque rechazaran los indultos a los militares genocidas y persistieran en su reclamo de anulación de las leyes de punto final y obediencia debida.
    Eso vuelve a acontecereb tiempos más cercanos, con contadas excepciones como la de Nora Cortinas (Línea Fundadora) respaldando a los trabajadores del INDEC o el no pago de la deuda odiosa, y la de Pérez Esquivel (SERPAJ), por cierto más crítico del gobierno y propugnando una política integral en materia de derechos humanos.

    Existe un déficit político del gobierno en cuanto a formular algunas de sus políticas mediante quienes representan a organizaciones de derechos humanos. Esto va en detrimento de la política de derechos humanos de los propios organismos. Quiérase ver o no.
    Es un poco lo que ha acontecido con el discurso de Hebe pero que es algo que registra antecedentes.
    Los organismos de derechos humanos pueden y deben expresarse sobre el acontecer político, pero presevando su autonomía.
    El déficit político del gobierno, que está en su origen, es parte de su construcción política.

    Nomás para ser fehacientes con los hechos, el primer presidente en recibir a las Madres fue el “Adolfo” en su mandato relámpago).

    Saludos

    1. Gracias por el dato del Adolfo. Se me había chispoteado. Cuántas cosas que hizo en esa semana fugaz!
      Por otra parte, me parece fenómeno empezar a pensar una política integral respecto a los derechos humanos. No son sólo un posicionamiento frente al pasado, sino que incluyen presente (lo que la revista MU denominaría «terrorismo de barrio»: http://lavaca.org/deci-mu/deci-mu-%C2%BFque-es-el-terrorismo-de-barrio/, por ejemplo) y futuro. Y quizás sea cierto que la subordinación (yo diría compartimiento de diagnóstico o recepción de demandas) no permite ver más allá del núcleo de interés específico. Es para analizar seriamente. La intención del escrito era más que nada expresar una sensación sobre Hebe y lo que ella significa en el imaginario de la sociedad toda.

  6. «La autonomía muchas veces es una falsa opción cuando realmente hay acuerdo con una política determinada.»

    El problemita es que estás hablando de organismos de DDHH que tienen que controlar al Estado, no asociarse con él!!!

    Entiendo que el el modelo «inclusivo» del viejo peronismo, para que nada quede fuera de su influencia, pero esa es jutamente la joda. Quieren armar la CGT de los DDHH????

    1. Primero, creo que la función de los organismos no es «controlar» al Estado sino seguir en la lucha por los mismos motivos que fueron fundados (no hace falta decir que esos motivos siguen tan vigentes hoy como ayer). Si el Estado ayuda en esa búsqueda y en esa lucha, mucho mejor. Y si los organismos están de acuerdo, se potencia el accionar. De todas maneras ni de cerca creo que haya que armar una CGT de los derechos humanos. Me parece una ridiculez y los organismos deberían preservar cierto margen de autonomía (expresé mi rechazo al culto excesivo a esa palabra que muchas veces no dice nada) y no fusionarse con el Estado. Pero no me parece erróneo que expresen acuerdos con el gobierno, sea éste o cualquier otro. Son actores sociales, como el que más, y tienen voz y voto.

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