The history begins again

Entre 1988 y 1989 la revista «Facetas» Que distribuía «la» embajada norteamericana trajo en sus páginas un interesante debate de destacados analistas (entre ellos Nye, Huntington y Paul Jhonson), el meollo de lo que se discutía era si el capitalismo (U.S.A.) se encontraba transitando por una etapa de crisis o era la decadencia próxima al derrumbe. ¿Catarro o metastasis? pero con la convicción que ambos diagnósticos respondían a una causa común: el descalabro provocado por el despliegue  a lo largo y a lo ancho del mapamundi, obligado por su autoasignado papel de «gendarme» de occidente.

Las dos potencias que lideraban los bandos en pugna zigzagueaban tambaleantes al borde del knock-out.

En una de esas la U.R.R.S.S. se desplomó.

Rápidos de reflejos, los think tank yanquis archivaron ese debate y desempolvaron un ensayo que  pérdido en algún oscuro rincón de su arsenal teorico  reposaba resignado a nunca ver el sol, el libelo les causó más euforia que un coctel de extasis. Apareció, entonces, un folleto amarillo (por su contenido y por el origen de su autor) que se llamó «The end of History», a partir de ese momento la maquinaria cultural convirtió al humilde ensayo en una especie del leyenda del Rey Arturo del neoliberalismo que, imparable, arrasó con las pocas barreras que encontró a su paso.

Afirmaba Fukuyama que la historia humana, como lucha de ideologías había terminado, con un mundo final basado en la una democracia liberal que se había impuesto finalmente tras el fin de la guerra fría.

El panfleto era parte de la ofensiva, el capitalismo proclamaba que el motor de la historia se paralizó con la caida del muro de Berlín, por falta de combustible para el alma (el deseo de reconocimiento).

El fracaso del régimen comunista demostraba palmariamente que la única opción era el neoliberalismo, en una muestra de claro sincretismo motivado por sus conveniencias los capitalistas y las sociedades centrales hicieron posible la combinación de un capitalismo salvaje en lo económico y una democracia a la que (para evitar molestas confusiones) llamaron de mercado,en lo político.

Se instaura así el pensamiento único, en el que las ideologías ya no son necesarias y han sido sustituidas por la economía.

Fukuyama  retoma la filosofía de Hegel, ignorando a Marx y avanza saltando. Clava bien hondo el puñal, Estados Unidos queda como la única realización posible del sueño marxista de una sociedad sin clases cuando afirma que : «El fin de la historia significará el fin de las guerras, de las revoluciones sangrientas, los hombres satisfacen sus necesidades a  través de la actividad económica sin tener que arriesgar sus vidas en ese tipo de batallas».

20 años después la droga no surte efecto,.

Desatada un crisis financiera en el centro imperial-de dimensiones parecidas a un agujero negro – produce un efecto dominó que involucra a las principales economías capitalistas del orbe.

Entonces lo inesperado, «la» potencia debe abandonar un principio rector y el estado -su estado- interviene groseramente en la economía. Se derrumba definitivamente el pensamiento único.

Las practicas intervencionistas en las economias «libres» y el designio no oculto de las comunidades de la peeriferia de desconcentrar las rentas provoca una crisis a escala planetaria, se resiente aún más la autoridad del centro imperial, carece de poder de veto, pierde iniciativa.

Subestimados lideres populistas de la periferia mutan en modelos a imitar.

El nuevo principio proclamado para esta etapa es que cada pueblo es artífice de su destino y arquitecto de su propia suerte.

Deja de ser el tiempo de las corporaciones, el mercado y del estado hegemónico y vuelve a ser la hora de los pueblos.

Alguien saca del fondo de un mueble heredado del padre obrero, un viejo ejemplar del discurso «La Comunidad Organizada».

No refulge como antes la luz del imperio, benéficas tinieblas proyectan un cono de sombra, un bendito cono de sombra, y se opaca el brillo de idolos paganos. La bendita oscuridad vela rollos con fotografías de jetones, ricos y famosos que ya nunca más tendrán las primeras planas y los primeros planos.

And, again, the story returns to start…

Acerca de OMIX

Omar Bojos / Bonaerense, moronense, peronista conurbanero y defensor de los compañeros con quienes militó en tiempos un tanto más difíciles que los actuales (gracias a Dios)

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10 comentarios en «The history begins again»

  1. Este post es magnífico OMIX, pero me temo que el discurso oficial de los dueños del planeta no se va modificar, aunque hayan entrado en flagrante contradicción con sus postulados de libertad de mercado sin intervención del estado. Ya escuché que el salvataje del estado a los Bancos masivamente quebrados es un recurso legítimo del neoliberalismo y que no es para nada contradictorio como «quieren hacerlo pasar los estatistas». Acá las reglas de la lógica sufren la misma violación que nosotros, si ellos mandan dos más dos puede ser cinco.

  2. Está bueno pero no. Como bien dice Eva está mas que clarito que en este caso se considerará perféctamente legítimo la intervencion del estado. Es lo que se dice un Neoliberalismo extremo, aunque suene a chiste no lo es es muy triste. Y espero de todo corazón que no puedan levantar esa crisis de ninguna manera. Es más no creo que la puedan levantar. Aunque pensandolo bien, por otro lado, toda la plata que están inyectando alguien se la esta quedando, no?

  3. ES una crisis de final abierto.
    Pero no estoy de acuerdo en la iodentificación ewntre USA, capitalismo y neoliberalismo.
    Son 3 cosas distintas, los primero dos conceptos son independientes, y el tercero es un subconjunto del segundo.
    Tal vez el primero y el tecero qyeden muy deshilachados después de ls crisis, pero al capitalismo lo veo poco vulnerable, por falta de alternativas.

  4. «Escucho un eco del pasado», fue la chicana que una mañana en el congreso nacional argentino George Bush Sr nos dejo para minimizar el escandalete protagonizado por Luis Zamora que le gritaba «fusss, cucha satán».

    Lo que intenté no es un borrador (en realidad un enchastro) para los dueños del discurso oficial del planeta, estaba dirigida a nosotros.

    Nos ha ganado la resignación?, ¿será quizás que el imposibilismo nos ha calaó hasta los güesos que no podemos, al menos, tener nuestros viajeros del MayFlower, nuestra leyenda de los caballeros de la mesa redonda?
    Me faltó agregar que las sociedades del planeta que se favorecieron con el neoliberalismo -expoliandonos por supuesto-, no se van a quedar de brazos cruzados si la cosa empeora, van a exigir que se implementen mecanismos para que los platos rotos los paguen otras socieades. No hay caso, no quería llegar `pero estoy obligado: las sociedades norteamericanas, europeas y japonesa entre otras tambien son culpables, acá no se trata de diferenciar entre «jerarca nazi» y «ciudadano aleman».
    Ese va a aser nuestro problema, la historia vuelve a empezar, las guerras, las revoluciones, la política, la diplomacia, es el fin del tecnoburocrata al cual la política no le movía ni un pelo.

    Gracias Eva, gracias Wally.

    Mariano T, lo cortés no quita lo valiente, de acuerdo, pero no soy yo el que confundió sino ellos que nos mandaron manzana, zanahoria y longaniza en el mismo cajón diciendo que era lo mismo, y muchos compraron (compramos). El capital que no tiene patria, pero se identifica con la potencia por que necesita de la maquinaria belica más sofisticada del planeta que le brinda seguridad juridica para cometer los atropellos hace aparecer a Fukuyama -en es e momento, el yanqui amarillo pone los 3 elementos en la licuadora y el mundo compra la identificación.
    Lo explica muy bien Soares en el pais, el fin del capitalismo de casino http://www.elpais.com/articulo/opinion/fin/capitalismo/casino/elpepuopi/20081008elpepiopi_5/Tes

  5. En realidad OMIX, muchos de nosotros estamos demasiado aplastados. Pero nuestros sueños nos auguran la esperanza de que de todo ésto surgiera por lo menos un nuevo discurso. Mirá, ví a Bush en la CNN visitando una escuela y hablando frente a los alumnos en época de la invasión a Irak, y diciendo con una sonrisa sarcástica así: «no encontramos armas ocultas de destrucción masiva, eso no significa que no las haya, pero si se hubiera demostrado que no las hay, igual hubiéramos invadido» y ví a los alumnos aplaudir la declaración formal de un presidente en la que anuncia el valor arbitrario del discurso norteamericano. Entonces comprendí que el debate de ideas con ellos no tiene sentido
    Lo que importa es que con esa claridad, con esa declaración del principio de la arbitrariedad, nosotros podemos retomar la importancia del discurso en nuestro ámbito interno y disputar contra la arbitrariedad el valor del argumento lógico. Digo que es una nueva causa a defender.

  6. Muy bueno Omix. De acuerdo con Mariano T. en que es una crisis de final abierto, pero sin duda hay un discurso hegemónico que se resquebraja, dependerá hasta dónde llegue la crisis para saber en qué medida perderá validez el discurso. Las cosas siempre se mezclan, con la caida de la URSS también se habló del final del marxismo y no tendrían por qué ser lo mismo. Por supuesto hay diferencia entre capitalismo, neoliberalismo y USA, pero estas sutilezas teóricas suelen perderse si la caida es muy estrepitosa, como lo fue la de la URSS. Veremos cómo es ahora el final de esta crisis.

  7. OMIX: No nos vendría nada mal en estos momentos mandar al carajo el paradigma neocon de «abrirnos al mundo». Creo que es el mejor momento para cerrarlas (con llave) y empacharnos un rato de un buen «welfare state» populista.

  8. Como no hay con que reemplazarlo, creo que el capitalismo sobreviviría incluso a una debacle en USA.
    Tal vez si la crisis termina en guerra mundial, hambrunas, destrucción total, canibalismo y desastre total, los sobrevivientes inventen algo distinto.

  9. Acá cayó el discurso neoliberal, la democracia liberal y el capitalismo -el keynesianismo lo es- siguen en pie. Los tipos se quedaron sin libreto para erl choreo marca cañon, eso no quita que sigan la función sin guión.

    Te invaden por que necesitan tu petroleo, tu gas o tierras raras o defender la norma tal de la tv digital y listo. Ya no hay cruzadas humanitarias.

    En el mundo los que quieran seguir explicando la realidad con los anteojos neocon van a quedar pedaleando en el aire, si los dejamos.

    Y algo asi les pasa a sus «espontáneos » agentes locales, por ejemplo fijate acá
    http://www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=1056876 los tipos no dejan de romper a pesar de todo, siguen prefiriendo el mejor postor antes que hacer que sus paisanos rebalsen de proteinas. Parece que no les queremos vender. Gataflorismo puro no te reconocen que en ocasiones es mejor estar distanciados o desconectados a contagiarse cualquier peste económica o tener determinada politica, pero eso si cuando su renta decae: «la Argentina es la gran ausente del mundo».

    Lo que digo apunta a aprovechar la oportunidad que los tipos se les movió el piso muy fiero, y salir a recuperar todo el terreno que las circunstancias permitan, ademas de dejar sentado que lo que buscamos ampliar el margen de maniobra qque hasta ahora tuvimos -o no tuvimos- en este mundo globalizado. Que el mercado no puede imponerse siempre y que si nuestra sociedad necesita seguir con su dieta asi será le pese a quien le pese.

  10. Me arriesgo en mi inexperiencia bloggera a decir que lo mejor para la región sería aislarse. La recesión viene igual, no? Entonces no nos van a comprar un joraca. Lo que intentarán hacer es vendernos de todo por todos lados. Por ahí dicen que hay que cuidarse de la invasión de productos brasileros. Yo creo que en vez de «cuidarse de» tandríamos que cuidarnos el culo mutuamente. Buscar una manera de cerrar un círculo económico regional.

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