El kirchnerismo pega más y mejor cuando está contra las cuerdas. Tanto que hasta parece haber elegido las cuerdas durante el fin de semana para pegar mejor el martes: una piña para adentro y otra para afuera. La conferencia de prensa buscó poner en caja a un PJ en el que se estaba reactivando la lógica chapadmalense. La cadena nacional dio un golpe certero, pero de esos que prolongan la pelea.
Las dos maniobras llegaron a tiempo para fortalecer el acto de hoy a la tarde y le dieron al gobierno la posibilidad de pasar a la ofensiva luego de que un cómico operativo de gendarmería despejara, al mismo tiempo que la ruta, los efectos positivos que había tenido el anuncio de la creación de un fondo de redistribución social. Sin embargo, aún cuando atina en sus reacciones inmediatas, el gobierno insiste con la configuración de un escenario político en el que no sólo se hace más oneroso ganar esta batalla sino que también obtura la apertura y el avance sobre nuevos frentes.
Es probable que el kirchnerismo necesitara un anti-kirchnerismo para hacerse posible a si mismo; un Otro respecto del cual constituirse. Es probable también que los otros Otros (los genocidas, los noventa, los organismos internacionales) fueran de algún modo «falsos». Pero también es probable que este Otro que construye el kircherismo, que este Otro que construye al kirchnerismo, no sea el que hace falta para que pueda formarse y avanzar un proyecto de y para los sectores populares.
La presencia de Moreno, Jaime y De Vido en la Plaza de Mayo parece haber sido pensada como un revulsivo para acelerar la polarización de los días siguientes. Casi como si Kirchner hubiera necesitado contar cuántos lo bancan cuando muestra sus caras más feas. Incluso en el actual contexto, la necesidad de la polarización es discutible como método para el avance de políticas que expandan los derechos sociales. Polarizar poniendo como eje la figura de los tres funcionarios más controvertidos del gobierno es una torpeza porque deja para el Otro a amplios sectores que acuerdan con el gobierno pero que ven en la insistencia sobre la certitud de los índices de inflación razón suficiente para no verse apelados por la invitación del gobierno.
Por suerte, hay quienes entendieron que lo que está en juego es algo más que los apellidos de los funcionarios. Casi como una respuesta a los representantes sabatinos del kirchnerismo, diferentes organizaciones convocaron a la Plaza de hoy afirmando que objetan «la destrucción del INDEC y la construcción del tren bala, la negativa a reconocer la personería de la CTA y la alianza con sectores de la mal llamada burguesía nacional«. Es notable que cuanto más necesario es ampliar las bases de sustentación del actual gobierno, organizaciones y dirigentes que desde hace años luchan por la profundización de la democracia tengan que ir a la Plaza haciendo aclaraciones y detallando posiciones.
El desafío, entonces, es ubicar como puntos de quiebre a cuestiones que logren desarticular la falsa homogeneidad del Otro que en esta oportunidad se ha constituído. Para que lo que hoy se plantea como una «voz propia» pueda ser la voz de las mayorías, es urgente pasar las acusaciones de golpismo a un segundo plano y traer al frente políticas que puedan resquebrajar al Otro e incorporar algunos de sus fragmentos a un nuevo Nosotros. Al calificar al Otro de golpista, se lo saca de la arena política quitándole margen para actuar por fuera del «golpismo». Además se lo hace irrecuperable. Esto no era un problema con los genocidas, para quienes no hay ni debiera haber más opción que el juicio y castigo. Pero en futuras batallas, y muy a pesar de los errores de sus actuales dirigentes, puede necesitarse a la Federación Agraria como aliada. Cuando el Otro queda construido como la total negatividad, se complica el trabajo con quienes necesariamente deben articular con él: gobernadores, intendentes, diputados provinciales… La construcción del Otro requiere sumo cuidado, no sólo porque es la construcción simultánea de un Nosotros, sino porque acota la acción de todos.
A casi siete años de colapsado el modelo neoliberal, las propuestas que hechas por el FRENAPO apenas antes del derrumbe nacional aún pueden servir de punto de partida para reconfigurar el escenario político de una manera un poco más favorable. Eso requiere acumular poder hacia adentro y hacia afuera. Es, por supuesto, un proceso complicado: no se va a dar en la pureza lozaniana sino como resultado de una determinada articulación de las contradicciones que ya están presentes. pero con toda seguridad, cuando Nosotros logremos ser los del ingreso universal a la niñez y la vejez, los del seguro de empleo y formación, los Otros van a ser no sólo menos y más débiles sino también menos desestabilizadores.
Defender un proceso político que se pretende transformar es una tarea difícil. Pero es la única tarea posible para quienes prefieren enfrentarse a la realidad que perder el tiempo con partos dolorosos o justificaciones de izquierda a posiciones de derecha.
Muy oportuno Alejandro. Además hemos constituído ese OTRO desde una nueva antinomia que reedita la vieja conocida de peronismo-antiperonismo, como un profesía venida de la mano de la frase citada hoy por Cristina, «la historia tiende a repetirse, primero como tragedia, luego como comedia». Esa frase de Marx, cuyos derechos de autor no quiso pagar Cristina hoy llamándolo «un señor», puede ser profética, si cometemos el error de fundar esta nueva antinomia kirchnerismo-antikirchnerismo, que nos condenaría a una reedición de revanchismo del OTRO, y a otra reedición del revanchismo nuestro.
Una de las formas de no reeditar el pasado es mantener esa reserva donde están todas las quejas, y manifestarlas. Otra de las formas es la de no demonizar al oponente, como dijo Marx en el prólogo de El Capital I : «Las figuras del capitalista y del terrateniente no aparecen pintadas, ni mucho menos de color de rosa. Pero adviértase que aquí sólo nos referimos a las «personas» en cuanto personificación de categorías económicas, como representantes de determinados intereses y relaciones de clase. Quien como yo concibe el desarrollo de la formación económica de la sociedad como un proceso histórico-cultural, no puede hacer al individuo responsable de la existencia de relaciones de que él es socialmente criatura, aunque subjetivamente se considere muy por encima de ellas.»
Fé de errata: profecía
[quote]Es notable que cuanto más necesario es ampliar las bases de sustentación del actual gobierno, organizaciones y dirigentes que desde hace años luchan por la profundización de la democracia tengan que ir a la Plaza haciendo aclaraciones y detallando posiciones.[/quote]
Totalmente, pero me parece ingenuo pensar que el gobierno vea como prioritario el tender lazos orgánicos con esas organizaciones cuando tiene el apoyo del aparato aquí ahora y sin peros. Es evidente que no debemos esperar alguna convocatoria de este tipo y en todo caso lo que deberíamos intentar es imponerla nosotros.
Es probable que cuando crecen los otros, nosotros nos dejamos de boludeces. Por lo menos eso parece haber pasado del domingo para aquí.
Saludos
El kirchnerismo hará una negociación – si fuera por su estilo fundacional, un intento de cooptación – con el sector agrario en el futuro inmediato. Los ruralistas aspiran a un papel más preponderante en la Argentina futura inmediata, los K quisieran tirar un par de huesos y mantenerlos como yacimiento de recursos fiscales e imaginario oligárquico. El conflicto cesa cuando abandonen esta idea y acepten la necesidad de un trato distinto.
Ya no gobernarán como gobernaron. Ahora vendrán otros con otros reclamos y sin voluntad de someterse y se parecerá más a un país normal, donde la política es negociar y no imponer.
¿Y el golpe donde está? ¿y el golpe donde está?, ¿donde esta elg olpe donde está? de forma de canto. Es una mentira más de éste desgobierno autoritario y totalitario.
Se vienen tiempos díficiles, incluso ya comparan a Moyano con José Rucci. ¿Con finales iguales?.
Buen artículo, Alejandro. Interesante. Pero me deja la siguiente pregunta: ¿hasta qué punto uno elige al Otro? Me explico.
Está claro que la constitución de la amistad y de la enemistad son un mismo momento aunque con fases y movimientos diversos en su interior. Pero creo que en la Argentina, dado lo salvaje y reacccionario que es el bloque de poder hegemónico, a cualquier actor progresista (o que intente serlo, o que así aparezca a los ojos de ese Otro, lo cual no es muy difícil) se le va a aparecer de inmediato como Otro un conjunto de actores diversos, pero que se aglutinan, dentro de los cuales se incluye a buena parte de la izquierda, los intelectuales y las clases medias.
Le pasó a Alfonsín y le está pasando a este gobierno (cada día veo más continuidades, en este punto, entre ambos). Quiero decir que —en ambos casos— el polarizado aparece como polarizador. Alfonsín, al principio, le contestaba a la Iglesia, a La Nación, a Reagan, a la burocracia sindical. El resultado era tacharlo de confrontador, de poco serio, de adolescente que jugaba a ser presidente. Buena parte de lo mismo le pasa al gobierno hoy.
Un ejemplo es lo de ayer. Después de mandar el proyecto al Congreso, los voceros del lockout dicen “esto es más democrático”… pero lo cierto es que ellos —al menos inicialmente, no revisé todo los documentos— nunca pidieron la participación del Parlamento para darle democraticidad y “calidad institucional” a la medida. Lo que querían era un diálogo directo, corporativo (es decir, saltando las instituciones de la soberanía popular), para negociar. Como el gobierno no se los dio, se fueron al lockout, a cortar las rutas, y a desabastecer a la población… al grito de “el Gobierno impone sus medidas”. ¿Cómo que “impone”? ¿El gobierno votado por la mayoría “impone”?
Ya están diciendo que el trámite parlamentario no va a valer si los diputados se mueven como hombres del gobierno (¿y qué esperan que hagan? ¿Estarían dispuestos a poner esa regla para todos los trámites parlamentarios? ¿La pusieron cuando el desguace menemista “de urgencia”?) o si el parlamento funciona como una escribanía del PEN…
En definitiva, la hegemonía de la derecha es tan grande (que este gobierno es lo más progresista que tenemos, me animo a la boutade de un no peronista…), que cualquiera que haga un tímido gesto de cuestionamiento de algunas reglas de esa hegemonía, va a ser demonizado y tildado de cuantas cosas sirvan para deslegitimarlo, por contradictorias que sean entre sí. Es decir, la hegemonía es tan grande, que no podemos ni siquiera darnos el lujo de elegir al enemigo… él ya nos eligió, por poco, mal y tarde que hagamos.
Alejandro, muy buena tu reflexión. Estoy de acuerdo. Pero recordá que éstos son los espacios para que Uds, cercanos al gobierno construyan vínculos con quienes nos sentimos rechazados. Somos muchos ciudadanos comunes (nada de trolls o agentes de la SIDE), que por no ser peronistas o populistas, con sueldos magros, sin campos, merecemos cachetadas en cada discurso. No vamos a encontrar un «forum» mejor para acercar posiciones que estos espacios. Pero no se permite opinar distinto. Quedamos construídos como la total negatividad, como bien decís. No merecemos nada. Sin embargo existimos. Habemos mas de los que hoy se junten a vivar al jefe de turno. Y en algún momento ese Otro pasa a tener importancia. Espero que no nos llamen sólo para llenar la Plaza.
Contador: FAA tiene muchas presentaciones en el congreso, si el oficialismo miró para otro lado note habilita para decir: nunca «pidieron la participación del Parlamento», recordá también los primeros debates en TV donde el oficialismo se escondía o mandaba a Gullo a patearla afuera, en esos días había dos legisladores oficialistas que habían trabajado con los ruralistas.
Afirme con sustancia por favor.
Eso: el gobierno tiene que hacer esfuerzos por romper las cadenas de equivalencias.
El PJ puede ser una buena estructura de aguante pero es limitada, tiene que abrir el margen. Y antes de incluir (o al mismo tiempo) necesita romper esas equivalencias, mostrarle, por ejemplo, al comerciante que la Sociedad Rural no es su igual y que defenderlo es ir en contra de sus intereses. Mostrar su costado oscuro no ayuda para nada a eso.
Detectar cuales son los actores que se han «sumado» a la movida anti gobierno, descartar los que no pueden ser ganados y concentrarse en romper las alianzas, en la medida de lo posible, con las clases medias.
Saludos!
Exelente post Alejandro, la equivocación es querer «inventar un otro» y no de «reconocer un otro» como debería ser, y como dice Escriba reconocer al otro fortalece el nosotros.
Eso es la base de la democracia. Reconocer la diversidad.
Provocar los enfrentamientos de clases lo que porvoca es la emergencia de la diversidad. Lejos de la polarización deseada, se provova una fragmentación. Una larga cola de diferentes posiciones que através de medios como este tenemos voz y voto.
Ya ni los medios violentos provocan la polarización deseada, en realidad provocan una multipolarización que tampoco es lo deseado.
Reconocer que hay una minoría sexual, una cartonera, una terrateniente, una chacarera, una parasitarias, una científica, una intelectual hace a la diversidad necesaria para crear un colectivo.
Provovar una polarización inventando un otro falzo siempre tiene terceras intenciones. Hay que cuidarse de eso.
Sopa:
me refería –como lo dije en el comentario– a los comunicados oficiales de la Comisión de Enlace, especialmente a los primeros, donde daban los motivos para ir al lockout.
Sólo en el octavo comunicado (Proclama de Gualeguaychú, 3/4), después de veintiún días de protestas, se habla del Parlamento. Antes, nunca. Y es llamativo, porque se pedía «diálogo». Es decir, lo que estaban pidiendo era mesa de concertación gobierno-entidades.
Si querés consultar las fuentes, acá está la información:http://www.ruralarg.org.ar/
Hay muchos modos de construir(se). Y contruirse por oposición es una forma no menor de hacerlo.
Acaso ELLOS no crearon al nuevo Bin Laden argentino Luis D’Elía para luego, por oposición, decirle a los Doños Rosos «Nosotros no somos ESO»? «Si Ud. está a favor del gobierno, está a favor de D’Elía»? y construcciones similares?
Por ende, y como a mí me dá mas «cosa» estar cerca de Miguens y de Magneto que de Luisito, aguante Cristina!
Cuando se hablo de que cualquier otra alterativa al kirchnerismo es, hoy, peor, de quienes especificamente estamos hablando? o sea quienes son «esos otros peores»?
Dentro del poder economico hay quienes estan con el gobierno y quienes estan en contra (los pools?), ahora dentro del poder politico, quienes serian los que tomen la posta de la derecha?
Peperino, de eso estoy hablando: la tenemos que imponer nosotros.
Golpe, qué golpe. Ni los golpistas quieren un golpe. Al menos no como los de antes.
Contador, puede que el Otro nos elija a nosotros. Y que la tesis de Revolución Tinta Limón deba leerse al revés: el antikirchnerismo sólo puede constituirse a partir de la especificación del kirchnerismo. Sin embargo creo que es posible reconfigurar las divisiones del campo político. Ponele que el sábado, en vez de Jaime, De Vido, Moreno hubiéramos mostrado un Solá, Filmus, Ginés (seguridad alimentaria, educación pública y salud en vez de tren bala, obra pública y control del INDEC). Creo que hubiera ayudado…
«el Otro», «quedamos construidos», «reconocer la diversidad». No me fijé bien si ya lo escribieron, pero no quedaría mal agregar «relato» o «texto».
Funny language.
Creo que si «Doña Rosa» se espanta de los D’Elía, no habría que ofrecer un flanco tan débil al pedo. Les regalás un argumento gratuitamente.
¿D’Elía tiene algún trabajo conocido? ¿Acomodar a sus familiares en ANSES con sueldos altísimos fue por mérito? ¿En serio alguien puede pensar que ser pro-iraní es ser progre? No siempre el enemigo de mi enemigo es mi amigo.
buen post,vengo intentando entender la utilidad de la polarización por parte del gob. hace rato.
Hay que aprender un poco de los yanquis y poner el Otro (que no existe) afuera. O ver que pasa si dejamos de culpar a los malos que no nos dejan gobernar e intentar integrar a los diferentes otros (que existen)
No puedo dejar de pensar que apelaron a la paranoia de los de izquierda con un fantasma que no hacia falta invocar, ya no están los los militares y los únicos con un aparato capas de bajar a un gobierno (por lo menos cuando esto empezó) son los peronistas.
El gobierno, como es historico en Argentina, constituye un Otro de modo que la comparación o evaluación no sea respecto de lo que propuso o sus potencialidades, sino respecto de ese Otro que siempre es peor o mas aún, el peor absoluto. El sistema K, además, no es que funcione mejor contra las cuerdas, sino que es en ese caso que queda en evidencia que no hay una alternativa viable. Es decir, no podría haber golpe porque no hay quien pueda ser gobierno. Al crear la ilusión de que puede haber un golpe, la gente sale a la calle y llena la Plaza, no en función de la realidad, sino en función de ese simulacro de un Otro, y así el gobierno, o los grupos dominantes, o como se los quiera llamar, pueden empujar aun mas los límites de lo que quieren hacer, y aquello que hasta ayer era impensable, se vuelve una posibilidad concreta, ya que es mejor tener un tren bala, por ejemplo, que un ESMA, según el imaginario que levanta el gobierno, o un tren bala que mas muertos de hambre, donde lo importante es que ya nunca se habla de ¨ningún muerto de hambre¨, sino que ya se acepta el ¨menos¨.
El problema con las tesis del post es que no hay alternativa. Es decir: hay que ir a Plaza si bien vamos con una posición crítica. Pero ¿qué hace que esa posición crítica valga algo? ¿y si el gobierno no hace nada de lo que se le pide, en términos de redistribución, etc, entonces que se hace? Y la respuesta es que nada, y en definitiva los que van a la Plaza, simulando ser críticos, en los fáctico, solo ayudan a sumar números para apoyar un modelo que a los sumo no es tan malo como el otro. Y ese otro modelo, es mas una ilusión que una realidad.
Creo que muchos están presos de la plaza, ignoran esa Argentina que los observa como un fenómeno de masas que cada tanto se repite. Necesitan mas y mas plaza. Creen que es la forma de sobrevivir.
Muy bueno, Alejandro. Creo que, la pérdida de iniciativa, en cierto momento, es la condición para la conformación del Otro.Habría que ver si los clivajes dados hoy, tienen la densidad suficiente para ya haber definido el campo de fuerzas opuestas que luego dispute ese gran centro que, obviamente, no está ni con uno ni con otro. Siempre sucedió así. Las polarizaciones no son ni está ticas, ni predefinidas, ni totales, pero tiene campos de fuerza relativamente estables.
Lo interesante es que quieren construirse a si mismos después de construir al otro. Me parece un poco omnipotente, no?
Construyanse primero a si mismos, y aparecerán los otros.
Esta cuestión de suponer que Kirchner puede existir sin De Vido y Jaime, me resulta curiosa. Kirchner nunca ha existido sin esos dos personajes. De donde salen los datos que permitieran construir la teoría de Kirchner sin De Vido/Jaime?
Excelente post, buen consejo para el próximo inquilino de la rosada en el 2011 . Cristina pudo abrir el juego , pero después de este conflicto (que no terminó) es muy dificil que quiera o pueda remontar.
Alejandro:
el ejemplo que ponés es justo. Vos decís que hubiera ayudado «que en vez de Jaime, De Vido, Moreno hubiéramos mostrado un Solá, Filmus, Ginés (seguridad alimentaria, educación pública y salud en vez de tren bala, obra pública y control del INDEC)».
Pero ahí está la cuestión, para mí. Sin duda es mejor, pero que Solá, Filmus y Ginés connoten lo que vos decís es muy complicado (no para mí, sino para el Otro y su fuerza de construcción de la realidad). Yo firmo, pero para el Otro, cualquier cosa que muestres, la va a resignificar (en el mejor de los casos) como lo peor (imposición, infantilismo, resentimiento). Ésa es su fuerza.
La pregunta que me queda es si es posible escapar en la Argentina de hoy, con lo brutal que es el dominio del mercado, a la lógica amigo-enemigo en el plano interno. Por algo lo que se está discutiendo hace casi cien días -bien o mal- es la recomposición del Estado.
España es un buen ejemplo de cómo enemigos se vuelven adversarios, y el enemigo se desplaza hacia afuera. Eso fue la transición. Pero el franquismo aflojó, y el capital se disciplinó… y el Estado redistribuyó. Eso sí, hay monarquía.
Pero si vos mostrás un Solá y un Ginés, Filmus como diría otro blogger no mide, no estás mostrando la realidad de quienes son los capos en el gobierno.
No sirve defender el gobierno sin ver las grandes falencias, eso es hinchar por los colores sin importar como juegan
Contador, Sopa, se trata, precisamente de lograr que sean las ideas que pueden encarnar personajes como Filmus o Ginés las que sostengan al proyecto político.
Charendon, el poder de Kirchner es contingente a las fuerzas políticas que lo sostienen. Creo que es posible reemplazar la administración centralizada de fondos por un Plan Estratégico Federal. Creo que la sociedad organizada aprieta mucho más que Moreno. Y creo que el pésimo servicio metropolitano de transporte de pasajeros no es producto del deseo de Néstor o Cristina sino el resultado de una relación de fuerzas con las empresas concesionarias y las constructoras (en el caso de los subtes) que sólo puede cambiarse mediante la presión de los damnificados por esta situación.
Alejandro, buen post. Me pareció muy lograda tu evaluación acerca de las consecuencias negativas de estigmatizar como irrescatables a los adversarios de turno.
Disiento eso sí, entre otras cosas, con tu último comentario: «el pésimo servicio metropolitano de transporte de pasajeros no es producto del deseo de Néstor o Cristina sino el resultado de una relación de fuerzas con las empresas concesionarias y las constructoras».
El sector del transporte, vía el tándem Jaime/Cirigliano, es uno de los principales aportantes de guita para la «caja negra» del kirchnerato (sino el principal: $100 por mes por cada bondi y $150 por cada laraga distancia, de los trenes mejor ni hablar…¿te suena UGOFE S.A.?).
Solo este año se subsidiará a empresas de transporte por más de mil millones de dólares (y solo en el GCBA se puede afirmar que dichos subsidios redunden en boletos baratos).
El denostado Tren Bala (800 kms, tecnología de punta) tiene un VAIT de aprox. USD 1,3 millardos. Lo mismo que presupuestaron para electrificar 62 Kms. de la Línea Roca (como esta es una obra inneludible nadie se fija que nos están vacunando peor que con el emblemático proyecto de Jaime).
Néstor, nuestro presidente de facto (al que ni siquiera votaron como Presidente del PJ, ya que hubo lista única) trató de repetir desde Marzo una estrategia que le sirvió en su administración de iure, elegir un sparring para sumarlo a sus huestes después de haberlo hecho mierda económica y mediáticamente. El macanón fué que este sparring le bancó más de un round, le devolvió golpe por golpe, y verificó nuevamente el viejo adagio que reza que los noqueadores de raza no están hechos para peleas largas.
Saludotes!.
Profundísimo lo suyo, Alejandro. En realidad cualquier entidad biológica, social o política se define a partir de lo que está afuera de ella, esto es, del otro y de la manera en que se relacionan.
Muy buen post!!
«…un Otro respecto del cual constituirse. Es probable también que los otros Otros (los genocidas, los noventa, los organismos internacionales) fueran de algún modo “falsos”. Pero también es probable que este Otro que construye el kircherismo, no sea el que hace falta para que pueda formarse y avanzar un proyecto de y para los sectores populares…»
Si Derridá lo lee se encíncopa o tiene un orgasmo.
Para hacer un proyecto desconstruccionista, que es el enfoque que ud. adhiere, se presupone la voluntad de ver la realidad desde el otro.
La ambigüedad no existe en este enfrentamiento. Claramente la postura del gobierno excluye de beneficios a la clase alta agraria. Tanto como esta clase ignora -y siempre ignoró-, la visión de quienes el gobierno dice representar en este conflicto.
Y aplicando nuestro conocimiento binario, blanco/negro, pobres/ricos, ignoramos toda otredad.
Pero el antiperonismo es una respuesta tipicamente latinaoamericana que se opone a un sentimiento, y no a una «otredad»
Existen tantos «antis» como estereotipos de peronistas existieron.
Y los K buscan recrear este hilo.
No buscan el conocimiento binario de la realidad, típicamente occidental. No buscan recrear el «otro» para comprenderlo o criticarlo. Buscan reivindicar el sentimiento, la idea de pertenencia a un grupo, excluyendo a la «otredad». Y todos conocen los códigos para estar en la línea K. Es estar de acuerdo con que los obreros estén bien. Todo sentimiento que afecte esa utopía merece ser excluido. Llámese FMI, SRA, o tia porota.
Isaurico: lo que escribe concuerda con mi idea, estan tratando de construir un K idealizado, pero en cuanto bajas a los datos (la realidad) no concuerdan.
Están «vendiendo» un producto por imagen y no por el prospecto.
dice Alberto en un comentario: «El problema con las tesis del post es que no hay alternativa. Es decir: hay que ir a Plaza si bien vamos con una posición crítica. Pero ¿qué hace que esa posición crítica valga algo? ¿y si el gobierno no hace nada de lo que se le pide, en términos de redistribución, etc, entonces que se hace? Y la respuesta es que nada, y en definitiva los que van a la Plaza, simulando ser críticos, en los fáctico, solo ayudan a sumar números para apoyar un modelo que a los sumo no es tan malo como el otro. Y ese otro modelo, es mas una ilusión que una realidad.»
en la tesis de ese parrafo de alberto, la historia esta determinada. ;-P
No hay apoyo critico posible q modifique el gobierno. No hay otro modelo peor, porq este solo es una ilusion.
mas allá de la chicana, alejandro no habrá descubierto a q se referia Cristina cuando dice q es hegeliana :P
saludos.